La nueva línea de negocio de Quabit prevé gestionar unas 500 viviendas anuales
Estará enfocada a la gestión de viviendas en cooperativa a través de 'Style Cooperativas'
Quabit Inmobiliaria ha puesto en marcha una nueva línea de negocios que se suma a la promoción inmobiliaria y gestión de suelo. Se trata de 'Style Cooperativas', a través de la que la compañía se encargará de la gestión de viviendas en cooperativa. Con ella, prevé la gestión de unas 500 viviendas anuales dirigidas a un perfil de cliente con poder adquisitivo medio-alto.
Además de esta cantidad de viviendas, en la hoja de ruta de Quabit está previsto alcanzar velocidad de crucero en un periodo de dos a tres años y una facturación en torno a los 175 millones de euros. "Apostamos por el crecimiento del mercado residencial de vivienda nueva en España durante los próximos años y queremos aprovechar todas las ventajas del mercado actual", señala el presidente de Quabit Inmobiliaria, Félix Abánades.
'Style Cooperativas' se encuentra en fase avanzada de prospección de suelos finalistas en zonas "con alto potencial de demanda" ubicados mayoritariamente en Madrid y centro de España, que abarca todo el Corredor del Henares hasta Guadalajara. Más concretamente, en Madrid-Norte (San Sebastián de los Reyes y Alcobendas), Madrid-Oeste (Boadilla del Monte), Madrid-Sur (Alcorcón, Móstoles y Getafe) y Madrid-Este (Alcalá de Henares, Rivas, Coslada y Torrejón de Ardoz).
"Tenemos experiencia, un profundo conocimiento del mercado inmobiliario, alta capacidad de gestión y también la estructura y el equipo necesarios para que 'Style Cooperativas' se convierta rápidamente en un operador destacado del mercado", explica Abánades, que añade que su principal ventaja y garantía es el profundo conocimiento del sector inmobiliario y el respaldo de su matriz, Quabit Inmobiliaria. La empresa también destaca que la reciente adquisición de Rayet Construcción por parte de Quabit es otra de las "ventajas competitivas", que podrá controlar los plazos de construcción de las promociones que se desarrollen en cooperativa, limitar el impacto de los costes de construcción y asegurar la calidad de todo el proceso constructivo.
Quabit asegura que precisamente estas ventajas repercutirán "muy favorablemente en el precio final de las viviendas que será mucho más competitivo, hasta un 20% inferior al de la oferta actual del mercado".
