Esta adquisición de acciones representaría una inversión de casi 110 millones de euros
Norges Bank, que gestiona el fondo soberano de Noruega, ha reforzado su apuesta por Repsol y ha elevado su participación en el capital de la energética hasta el 5,417%, su posición más alta desde que entró en la compañía.
En concreto, la firma, que se caracteriza por ser un inversor estable en las empresas en las que entra, ha incrementado su participación en Repsol en un 0,88% del capital desde el 4,535%, que era la última posición que tenía comunicada a principios de este mes. Esta adquisición de acciones representaría una inversión de casi 110 millones de euros a los actuales precios de mercado.
El fondo, que emergió en 2020 en el accionariado de Repsol, controla de manera directa un paquete de más de 65,94 millones de acciones de Repsol -de ellos más de nueve millones de títulos todavía a través de un colateral-, representativo de ese 5,417%, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
A los actuales precios de mercado, esta participación del fondo soberano noruego en la petrolera asciende a unos 905 millones de euros. Los títulos de Repsol cotizaban este martes a las 10.50 horas a un precio de 13,72 euros, con una subida del 0,44%.
SE ACERCA A BLACKROCK COMO MÁXIMO ACCIONISTA
Norges Bank es el segundo máximo accionista del grupo dirigido por Josu Jon Imaz, ya muy cerca de la firma de inversión BlackRock, que posee un 5,475%, y por delante de Millennium Group, que elevó recientemente su participación hasta el 2%.
El fondo soberano noruego pasa por ser uno de los más estrictos en materia de compromiso con el cambio climático en sus políticas de inversión y tiene una clara apuesta inversora por empresas de renovables o en proceso de descarbonización. Norges está presente en el capital de las principales compañías del Ibex 35.
Elevando su participación redobla su apuesta por una compañía como Repsol, que en diciembre de 2019 se convirtió en la primera compañía de su sector en asumir el objetivo de ser un grupo cero emisiones netas en 2050.
Este incremento en la participación de la energética por el fondo también se produce por el efecto de la amortización de acciones que viene haciendo la energética como fórmula de pago a sus inversores, lo que hace que, al haber menos títulos en circulación, porcentualmente los accionistas presentes tengan más porcentaje de capital.