La subida de los beneficios y los fuertes balances contrarrestarán el menor crecimiento y la inflación
Moody's Investors Service mantiene visión estable sobre la banca europea, aunque prevé que la zona euro entre en recesión a lo largo de 2023. En su opinión, la subida de los beneficios del sector y los fuertes balances actuales contrarrestarán el menor crecimiento económico y la elevada inflación.
"Mantenemos una perspectiva estable para la mayoría de los sectores bancarios europeos, ya que el aumento de los márgenes netos de interés y los sólidos balances compensarán las presiones de la desaceleración económica y la alta inflación", explican sus expertos en un informe publicado este martes.
Su previsión es que, durante 2023, se produzca "una desaceleración de la actividad económica en la región, con contracción en algunos países", que vendrá seguida de "débiles recuperaciones en 2024".
Según su valoración, las subidas de tipos de interés realizadas por el Banco Central Europeo (BCE), que ya ha anticipado más subidas de tasas en los próximos meses, "ampliará" el margen neto de interés de los bancos, "su principal fuente de ingresos", mientras los "costes operativos aumentarán más lentamente".
Además, Moody's estima que el "aumento modesto en los préstamos problemáticos se cubrirá con una mayor rentabilidad y se complementará con reservas preventivas acumuladas durante la pandemia".
En su opinión, las tasas de interés más altas "encarecerán la financiación, pero la liquidez seguirá siendo abundante". Y "los colchones de capital se mantendrán estables en términos generales". Para Moody's, las reformas de Basilea III "han fortalecido significativamente a los bancos". Por ello, los pagos de dividendos más altos, las recompras de acciones y los activos ponderados por riesgo más elevados probablemente se verán compensados por la generación de capital basada en los beneficios".
La principal razón de Moody's para anticipar una recesión en Europa es el "actual shock en el suministro de energía". Según sus cálculos, "Europa sufrirá la mayor desaceleración a nivel mundial", por lo que han recortado sus previsiones de crecimiento para 2023 y aumentado las proyecciones de inflación para varios países, a medida que se desarrolla la crisis energética. "El conflicto Rusia-Ucrania sigue siendo central en el panorama macroeconómico", explican sus expertos.
En este contexto, esperan que "los hogares en países donde las hipotecas son en su mayoría a tasas de interés variable o fijas a corto plazo tienen más probabilidades de sufrir" los efectos de las subidas de tipos, que "seguirán aumentando, perjudicando la demanda de préstamos y los costes del servicio de la deuda".
Además, Moody's destaca que la elevada inflación "erosionará los márgenes de las empresas y las finanzas de los hogares, a medida que caigan los salarios reales". Sin embargo, la agencia considera que la morosidad se mantendrá por debajo de la crisis de 2008, apoyada por la fortaleza del mercado laboral. En cualquier caso, afirma que "los préstamos morosos aumentarán después de caer durante muchos años".
Para estos analistas, hay "seis países europeos" que "son los más vulnerables a las crisis del mercado energético". Así, consideran que "la dependencia energética de Rusia es una vulnerabilidad para Austria, República Checa, Alemania, Hungría, Italia y Eslovaquia y, por extensión, para sus sistemas bancarios". Y añaden que "los hogares en los tramos de ingresos más bajos serán los más afectados".
Por otra parte, consideran que el mercado inmobiliario se mantendrá "estable", aunque "el riesgo de una corrección está aumentando" en algunos mercados, aunque no prevén una "caída desordenada" como ocurrió en 2008.
En este escenario, la evolución del margen de intereses de la banca será diferente en función del tipo de negocio de cada entidad. "Los bancos con una mayor dependencia de los ingresos por intereses netos, los préstamos a tasa variable y la financiación basada en depósitos se beneficiarán más de las tasas de interés más altas", señala Moody's.
Según su análisis, "la expansión del margen neto de intereses dependerá en gran medida de la capacidad de los bancos para mantener bajo control los costes de los depósitos". Así, anticipa que "la abundante liquidez limitará el apetito de los bancos por pagar más por los depósitos".
Sobre los costes, Moody's señala que su control ha sido "clave" para impulsar la rentabilidad, por lo que "los bancos con una alta relación coste-ingreso y con importantes pendientes inversiones en tecnología serán los más afectados por la alta inflación". Así, afirma que "los bancos del Reino Unido, Francia y Alemania tienen una relación coste-ingreso más alta que sus competidores europeos".