El director general de PharmaMar afirma que están cumpliendo con sus planes y que esperan que 2017 sea un buen año
2017 podría ser el año en el que PharmaMar por fin despegue tras el letargo que vivió en bolsa en 2016 y después de las fuertes caídas que experimentó a finales de 2015. Hay acontecimientos importantes -que deberían llegar durante la segunda parte del año y que tienen que ver con dos de sus principales productos, Aplidina y PM1183- que prometen animar a la acción. El riesgo: no cumplir con el calendario y decepcionar al mercado. De momento, "vamos en plazo", avisa Luis Mora, director general de esta biotecnológica que, como dato curioso, cuenta con tres ex ministros en su Consejo de Administración.
Pregunta (P.): 2,3 millones, eso es lo que dicen los analistas que ganará PharmaMar en 2017. ¿Saldrán de pérdidas este año?
Respuesta (R.): 2017 va a ser un año muy importante. A finales de año tendremos la opinión de la EMA (Agencia Europea de Medicamentos) para la aprobación de Aplidina, tendremos también los resultados del ensayo pivotal de cáncer de ovario para PM1183 y, si es positivo, empezaremos a preparar el dosier tanto para la FDA (Food and Drug Administration) como para la EMA. Con los acuerdos que ya hemos hecho, como el de Chugai para Japón, con la evolución positiva que prevemos para las ventas, esperamos que sea un buen año. Por otro lado, la inversión en Investigación y Desarrollo (I+D) absorberá bastantes recursos, pero esperamos que sea un buen año, aunque nunca damos guidance (previsiones) de resultados.
"La compañía hoy está muy infravalorada... por comparables y por fundamentales"
P.: En bolsa, los expertos les dan el mayor potencial de subida de todas las compañías del mercado español, de más del 80%. ¿Esperan que, con todos estos acontecimientos que ha mencionado para este año, el valor registre, al menos, parte de esa subida estimada?
R.: Al final el mercado tiene que reflejar los buenos resultados que estamos obteniendo. La compañía hoy está muy infravalorada... por comparables y por fundamentales. Ese potencial de subida se tiene que dar con todos los proyectos y todos los ensayos que están en marcha. Y más con la estrategia de la compañía, que es crear una red de ventas en Estados Unidos, que es el 46% del mercado mundial en oncología. Hemos sido capaces de hacerlo en Europa y pensamos que estamos capacitados para hacerlo en Estados Unidos. PM1183 es la palanca que nos va a permitir crear esa infraestructura en Estados Unidos y recoger un importante EBITDA.
P.: De todos los hitos que ha enumerado para este año 2017, ¿cuál diría que es clave y que sería una gran decepción si no llegase a cumplirse?
R.: No hay uno que resaltar. La aprobación de Aplidina por parte de la EMA -es nuestro segundo producto tras el Yondelis- es importante. El ensayo positivo de ovario para PM1183 es importante. Posibles licencias que pueden venir a lo largo del año... Yo no nombraría uno, sino los tres.
P.: Sigamos hablando de su evolución en bolsa. El último gran batacazo de PharmaMar tuvo lugar entre octubre de 2015 y principios de 2016 y ustedes pidieron a la CNMV que investigara si había habido manipulación. Les dijeron que no y recurrieron. ¿Qué les contestó finalmente la CNMV?
R.: Todavía nada. Fue muy sorprendente porque, además, con la aprobación de Yondelis en el año 2015 en Estados Unidos, la acción perforó los 4 euros. Estaba todavía lejos de lo que nosotros entendemos que es su valoración, pero estábamos muy contentos porque por fin parecía que se estaba empezando a reflejar en el valor. A raíz de ahí, en una actuación incomprensible, empezó a haber unas caídas brutales de la acción y detectamos unos movimientos no claros. Además, observamos una forma de atacar al valor inusual, más si cabe cuando había habido una noticia buenísima y esperada desde hacia muchos años. Lo pusimos en manos de las autoridades y la primera contestación fue que no. Hemos recurrido y ahí estamos.
"PM1183 es la palanca que nos va a permitir crear esa infraestructura en Estados Unidos y recoger un importante EBITDA"
P.: En Estados Unidos, usted ha dicho que hay incertidumbre y que no es momento de salir a bolsa. Además, la última subida de tipos de la Fed no es la mejor noticia para el sector de biotecnología. ¿Descartan este proyecto para 2017?
R.: Estamos trabajando en ello pero todavía no tenemos fecha. No sé si será a finales de este año o si será el año que viene, pero ni mucho menos se ha descartado. Creo que el mercado americano es un mercado donde compañías como la nuestra tienen que estar por muchos motivos, por visibilidad, por especialización de analistas, bancos de inversión... Cuando haya una ventana importante que cree valor para el accionista, allí iremos.
P.: El tema de una OPA sobre la compañía es recurrente, y más a los precios a los que cotizan. ¿Ese interés que dice el presidente de PharmaMar que han demostrado “algunos”, proviene de España o del extranjero?
R.: Esto es algo que nosotros nunca comentamos. Una compañía como la nuestra, cotizando en España con la capitalización de mercado que tenemos, infravalorada... Es una compañía muy barata. Entiendo que hoy en día es una compañía apetecible para algunas compañías del sector. El riesgo esta ahí.
"Estamos cumpliendo los plazos en cuanto a ensayos, que esperamos que sean positivos para poder presentar los dosieres. Los plazos van en perfecta armonía con la estrategia"
P.: La estrategia de PharmaMar, que repiten como un mantra, es tener tres productos -Yondelis, Aplidin y PM1183- en cuatro años para cinco indicadores. ¿Van en plazo o temen decepcionar al mercado?
R.: Vamos en plazo. Estamos cumpliendo los plazos en cuanto a ensayos, que esperamos que sean positivos para poder presentar los dosieres. Los plazos van en perfecta armonía con la estrategia.
P.: La mayoría de los analistas aconsejan comprar PharmaMar pero también están los que no confían en ustedes y tienen opiniones tan tajantes como las que dicen que ofrecen "poca claridad o transparencia en los datos clínicos". ¿Por qué creen que hay tanta polaridad en las opiniones hacia ustedes?
R.: Yo creo que sobre todo esto ocurre en España y es algo sorprendente. El año pasado hicimos más de 280 one to one (encuentros cara a cara con inversores) por EEUU y por toda Europa y la verdad es que no existe esa dicotomía, esa diferencia. En cuanto a la transparencia, es total, los datos son públicos. Las fases III son más largas, duran más, pero cuando se tienen los datos, se publican. Otra cosa es que se entienda o que en España muchos inversores quieran saber más a corto plazo, pero es que este negocio es así, los ensayos clínicos duran lo que duran.
P.: Ese interés de los inversores españoles por saber más a corto plazo también se nota en su evolución en bolsa. Da la impresión de que ustedes se mueven a golpe de noticia, sin que se valore el largo plazo.
R.: Claro, esa es la diferencia con un inversor americano. De las 170 compañías que están cotizando en el Nasdaq Biotech Index, tan solo un 10% tiene un EBITDA positivo, el resto tiene EBITDA negativo durante años, pero la creación de valor se percibe en cuanto que van pasando de fase y van publicando los datos en los congresos. Entender ese valor de los productos en las aplicaciones clínicas no siempre es sencillo. Pero, afortunadamente, es cierto que se está aumentando este nivel de conocimiento también en España entre muchos inversores. También es cierto que este 'cortoplacismo' que existe aquí se debe mucho a la tradición inversora que hay en España, que plantea que los resultados deben dejar un dividendo. En la cultura nuestra, ese dividendo es importante...
P.: Y ustedes el dividendo lo tienen por ahora descartado...
R.: Hemos dado EBITDA negativo, no podemos dar dividendo, pero sí esperamos que, con toda esta evolución de la cartera, en un futuro no muy lejano, se pueda pagar dividendo, obviamente.