Tras la aprobación de la Agencia Europea del Medicamento
La Comisión Europea ha dado luz verde a la vacuna de Moderna, la segunda que se administrará en la UE, tan solo horas después de que la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) diera su propia aprobación a la vacuna tras su reunión extraordinaria.
El visto bueno de la agencia, con sede en Ámsterdam, es el paso previo para que la Comisión Europea (CE) pueda emitir una licencia de uso condicional del fármaco en todos los países europeos y en las mismas condiciones, lo que permitiría sumar esta vacuna a la de Pfizer/BioNTech, aprobada el 21 de diciembre.
"La reunión del comité de medicamentos humanos (CHMP) de la EMA para evaluar la vacuna del covid-19 de Moderna ha comenzado ya. Os haremos llegar el resultado", confirmó la agencia, que, a diferencia de lo que ocurrió con Pfizer, ha mantenido más hermetismo sobre este encuentro y no ofrecerá rueda de prensa con las conclusiones.
La EMA trató de adelantar su evaluación de la vacuna de Moderna al pasado lunes, pero algunos de los científicos de los 27 países europeos tenían aún muchas preguntas sobre el fármaco, por lo que dedicaron las últimas 24 horas a "trabajar intensamente para aclarar cuestiones pendientes" con la farmacéutica.
Aunque hoy solo ha informado de sus conclusiones por escrito, la EMA organizará el próximo viernes un evento público en el que explicará "a los ciudadanos europeos", con preguntas de expertos e interesados de toda la zona comunitaria, la evaluación y la aprobación de la nueva vacuna de la Covid-19.
Tras Pfizer, Moderna es la segunda farmacéutica que ha solicitado a la EMA estudiar una Autorización de Comercialización Condicional (CMA, en sus siglas en inglés) para que los países europeos puedan usar su fármaco en las campañas de vacunación que comenzaron la semana pasada.
Bruselas ha comprado un total de 160 millones de dosis de la vacuna de Moderna, de la que se necesitan dos inyecciones por persona con un mes de diferencia entre la primera y la segunda, aunque, a diferencia de la de Pfizer, ofrece la ventaja de que no tiene que almacenarse a una temperatura de 70 grados centígrados bajo cero, sino a 20 bajo cero.
La vacuna de Moderna ya ha recibido el visto bueno de las autoridades sanitarias de Estados Unidos, Canadá e Israel, y se espera que la Unión Europea le otorgue la licencia en cuestión de días, si no de horas, siempre que los científicos de la EMA la consideren lo suficientemente segura y eficaz como para usarla en las campañas de vacunación masiva.
Aunque todavía no le han solicitado una licencia para sus vacunas, la EMA está también estudiando en tiempo real los datos que van compartiendo la empresa británica AstraZeneca y la Universidad de Oxford, por un lado, y Janssen, filial de la estadounidense Johnson & Johnson, por otro, en previsión de que la pidan en las próximas semanas.