El Gobierno tenía previsto aprobar un recorte de la retribución a las redes en 2019
El sector eléctrico español tiembla en bolsa ante la posibilidad de que finalmente se convoquen elecciones anticipadas. El aumento de la incertidumbre política es una amenaza para las eléctricas, que se juegan mucho en 2019, cuando está prevista una revisión tarifaria que comenzaría a aplicarse en 2020 y en la que el sector se juega 250 millones de euros.
El pasado viernes, tras la moción de censura planteada por los socialistas, Iberdrola, Endesa, Gas Natural Fenosa, Red Eléctrica y Enagás perdieron unos 2.700 millones de euros en capitalización bursátil. El actual ministro de Energía, Álvaro Nadal, ya puso en 'pie de guerra' al sector hace unos meses, cuando anticipó una reducción de los retornos a las redes de gas y electricidad que posteriormente matizó.
Los expertos de Kepler comentaban esta misma semana, antes de que se conociera la sentencia sobre la trama Gürtel y después de que se aprobaran los Presupuestos Generales, que el actual Gobierno lideraría la revisión regulatoria prevista para 2019, y que se aplicará a partir de 2020. Sin embargo, esta previsión, que ya había sido descontada por el mercado, podría quedar ahora en el aire.
El Ministerio de Energía anticipó en febrero una serie de ajustes en los sistemas de retribución, atendiendo a las observaciones realizadas por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sobre la existencia de un exceso de retribución por diferentes conceptos.
Las reformas anunciadas generarían un ahorro al sistema eléctrico de hasta 190 millones de euros, según las estimaciones que facilitó el ministro Nadal. En el sector de gas, los ajustes que baraja el Gobierno ascienden a unos 50 millones, por lo que el sector en su conjunto se juega unos 250 millones de euros anuales.
Estos anuncios provocaron fuertes pérdidas para el sector eléctrico, debido a que el mercado anticipó un recorte importante de sus beneficios en España. Tras descontar estas noticias, las eléctricas habían vuelto a despuntar en bolsa, al calor de posibles movimientos de consolidación en el sector energético europeo.
RIESGO DE INTERFERENCIA REGULATORIA
Sin embargo, la posibilidad de que haya elecciones anticipadas y un cambio de Gobierno ha vuelto a lastrar la cotización del sector, que se enfrenta ahora a una mayor incertidumbe política. “El riesgo de interferencia regulatoria en España es mayor que en otros países, lo que perjudica el perfil de ingresos del sector eléctrico”, han criticado los expertos de Fitch Ratings.
En su opinión, uno de los problemas principales es “la falta de un regulador independiente con una postura transparente y consultiva”. La agencia critica que el objetivo del Gobierno es reducir los costes regulados del sistema “a costa de las compañías eléctricas, como ocurrió en 2014”.
Para Fitch, “el marco legal español está más expuesto al riesgo político y es menos transparente que el de Portugal e Italia”. La agencia concluye que “si la visibilidad de ingresos es afectada por ajustes regulatorios inesperados, nuestra visión del sector se verá afectada”.
En este escenario, las fuertes caídas bursátiles del pasado viernes añaden aún más presión a un sector eléctrico que se verá sometido a una mayor incertidumbre política en las próximas semanas. Cuando parecía que los inversores ya habían descontado los recortes del Gobierno, ahora deben descontar de nuevo la posibilidad de un cambio en el Ejecutivo.