El último club que ha abandonado el proyecto ha sido el Atlético de Madrid
La Juventus y el Manchester United se hunden en bolsa tras el fiasco de la Superliga, después de que los clubes ingleses y el Inter de Milan hayan abandonado el proyecto, por el rechazo de sus propios aficionados y de la UEFA y la FIFA. En España, el Atlético de Madrid acaba de hacer pública su renuncia mediante un comunicado; y en Italia la Juventus y el AC Milan han reconocido que ya no es viable.
Las acciones del Manchester, que cotizan en Wall Street porque sus principales accionistas son americanos, ya bajaron el martes un 6%; y este miércoles han caído casi un 4% en la bolsa de Alemania.
Por su parte, los títulos del club italiano, que se dispararon un 18% tras el lanzamiento del proyecto este lunes, han bajado un 13,7% en la bolsa italiana, hasta 0,75 euros por título.
Los seis clubes ingleses que habían confirmado su participación en la nueva Superliga europea han dado marcha atrás este miércoles, apenas dos días después de haberse vinculado como socios fundadores, según han anunciado de forma oficial tras el adiós del Manchester City, que fue el primero en hacerlo público. El Inter también renuncia y se espera que el Milan lo haga en breve.
Por su parte, el Atlético de Madrid ha sido el primer club español que abandona. En un comunicado, ha señalado que "es esencial la concordia entre todos los colectivos que integran la familia rojiblanca, especialmente nuestros aficionados" y que "tomó la decisión el lunes atendiendo a unas circunstancias que a día de hoy ya no están".
Pese a que la Superliga ha emitido un comunicado de madrugada en el que confirma su intención de seguir con el proyecto, lo cierto es que la competición ha nacido herida de muerte, debido al rechazo frontal de la opinión pública, al considerar que adultera la competición.
Por si esto fuera poco, ya hay estudios que señalan la enorme pérdida para los clubes fundadores de su imagen de marca. Según la consultora líder en valoración financiera de marcas, Brand Finance, es probable que los clubes implicados pierdan un valor de marca combinado de 2.500 millones de euros, aunque esa cifra podría ascender hasta 4.300 millones de euros.
A partir de ahora, pese a los intentos del Real Madrid y la Juventus, los principales impulsores del proyecto, en que la Superliga siga en marcha, se abre un duro escenario para estos clubes, que podría ser incluso peor si, como parece, otros clubes (Barcelona) abandonan una competición que todavía no ha comenzado.