Fija su nueva valoración de la operadora un 10% por debajo de su nivel de cotización actual
Barclays recortaba esta semana el precio objetivo de Telefónica ligeramente, hasta los 8,7 euros desde los 8,8 euros previos. El nuevo precio aun otorga a la operadora un importante potencial de subida del 40% desde los niveles actuales de cotización. Los expertos de JP Morgan hacen lo propio este jueves. Sin embargo, su valoración teórica anterior (5,6 euros) ya estaba por debajo del precio de cotización (6,2 euros) y la nueva se sitúa aún más abajo (5,6 euros), lo que implica un potencial bajista del 10% para la operadora.
Telefónica presentará sus resultados del cuarto trimestre y del conjunto de 2019 el próximo día 20. El consenso de FactSet espera un beneficio neto de 2.341 millones de euros para el conjunto del año pasado (un 30% por debajo de los 3.331 millones que ganó en 2018) y un OIBDA de 15.663 millones de euros, un 0,6% superior a los 15.571 millones de 2018.
Esta estimación supondría que Telefónica no cumpliría con su objetivo de subida de OIBDA del 2% fijada para este año. Los expertos de Credit Suisse ya publicaban recientemente que "hay una idea generalizada" de que la operadora incumplirá este objetivo. Pese a ello, creen que hay catalizadores que pueden impulsar a alza a Telefónica este año, como la mejora del OIBDA en España o la venta de algún activo adicional.
JP Morgan anuncia hoy este recorte de precio, al tiempo que reitera su consejo de 'infraponderar' sobre Telefónica. El banco estadounidense explica que España seguirá en el foco en la presentación de sus cuentas.
"Seguimos viendo riesgos a nivel doméstico en Telefónica (...) y nos preocupa que los riesgos de espectro estén subestimados. Actualizamos las estimaciones antes de los resultados, lo que nos lleva a recortar nuestra previsión de incremento de OIBDA del 2% y a bajar el precio objetivo de 5,9 euros a 5,6 euros", explica JP Morgan.
Los títulos de Telefónica tuvieron un rendimiento un 15% inferior al del sector en 2019. El banco estadounidense indica que los vientos en contra incluyeron el aumento de la incertidumbre competitiva en España, las presiones por el impacto de las divisas y los problemas en la filial alemana O2D. También apuntan que han comenzado a ser "más constructivos" con sus filiales alemana y brasileña, pero siguen creyendo que las incertidumbres pesan y justifican su consejo de 'infraponderar'.