El consejero delegado de la petrolera ha recordado que los impuestos indirectos los pagan los consumidores
Josu Jon Imaz, consejero delegado de Repsol, ha recordado a Pedro Sánchez, nuevo presidente del Gobierno, que los impuestos indirectos los pagan los consumidores. Por esto, ha pedido medidas coherentes y progresivas.
Además, ha rechazado pagar carreteras subiendo el impuesto a los hidrocarburos, tal y como proponía el informe del Comité de Expertos para la Transición Energética con un incremento del 28% en el gasóleo, sería una medida "regresiva". El consejero delegado de Repsol ha hecho estas declaraciones en la actualización del plan estratégico de la compañía para 2018-2020 con el que pretenden invertir 15.000 millones de euros. Además, aumentarán el dividendo a los accionistas hasta el euro por acción en 2020, con un escenario de 50 dólares el barril.
Imaz ha indicado que son "las administraciones les toca tomar las decisiones y a las empresas cumplirlas", aunque ha pedido"racionalidad y progresividad" a la hora de aplicar medidas si se quiere construir una sociedad igualitaria. Así, mostró su "máximo" respeto a las instituciones y aseguró que a la compañía le toca cumplir con las "reglas del juego" y buscar crear valor, generar empleo y mantener el compromiso con los accionistas.
El consejero delegado de la compañía también se ha dirigido a la nueva ministra de Energía y Transición Energética, Teresa Ribera, y le ha pedido que España apueste por reducir sus emisiones de CO2, "pero con la máxima eficiencia y los menores costes para la industria y para que el consumidor no tenga que pagar costes añadidos". A este respecto, el directivo subrayó que Repsol es una empresa "que produce mucho gas, más que petróleo", que es un vector para reducir las emisiones de CO2 en el mundo", que quiere ser "parte de la solución en esa transición energética".
INVERSIONES CON UN 10% DE RENTABILIDAD
Por otro lado, Repsol busca adquisiciones de "capacidad" eléctrica para construir su negocio de gas y electricidad, con el que abrir una nueva etapa tras su salida del capital de Gas Natural Fenosa, que le den una rentabilidad superior al 10% y que no sean activos regulados, ya que ese "no es su negocio", ha afirmado el consejero delegado de la compañía, Josu Jon Imaz.
El consejero delegado de la compañía también se ha dirigido a la nueva ministra de Energía y Transición Energética, Teresa Ribera, y le ha pedido que España apueste por reducir sus emisiones de CO2
Imaz, respecto a posibles negociaciones con Viesgo para la adquisición de activos, ha subrayado que la petrolera está hablando "con unas cuantas empresas" para poder construir este nuevo negocio, sobre el que mientras estuvo en Gas Natural Fenosa no se atrevió a dar ningún paso, pero que "ahora vamos a ir construyendo", avanzó.
No obstante, ha recalcado que el grupo no busca una gran adquisición, "de 1.000 millones de euros, sino de decenas o centenares". "En este sentido veremos si con todas las empresas de las que hablamos avanzan o se estancan. Y si no, pues avanzaremos por el camino orgánico puro y duro", dijo.
Repsol, que cuenta con 600 megavatios (MW) de capacidad actualmente, se marca como objetivo alcanzar los 4.500 MW en el horizonte de 2025, así como contar con una cartera de clientes de 2,5 millones en el negocio minorista de gas y electricidad y una cuota de mercado del 5%.
CICLOS COMBINADOS
Imaz también ha considerado que la adquisición de ciclos combinados de gas "puede tener todo el sentido", además de la generación renovable", ya que están con bajos precios en toda Europa, "menos de lo que se invirtió en ellos", y ha subrayado que el gas natural tendrá "un papel relevante" en la transición energética.
El directivo tampoco desveló cuándo el grupo constituirá su comercializadora de luz y gas, con la que competir así con las grandes eléctricas (Endesa, Iberdrola y Gas Natural Natural Fenosa). "Tendrán noticias en los próximos meses, avanzaremos en ese camino", ha señalado.
Lo que sí ha defendido Imaz es que Repsol, en este negocio será "un actor relevante en la generación distribuida". "Para ello queremos mercados que en cierta medida podamos tener la máxima apertura posible y que puedan competir a mercado. "Queremos ser actores en un mercado abierto y con la tecnología como vector fundamental", ha añadido al respecto.