Prevé que habrá recesión en la segunda mitad del año y que afectará a la hotelera
Jefferies espera que Meliá publique unos resultados del primer trimestre del año (los anunciará el próximo 11 de mayo) "fuertes", impulsados por el ocio y la recuperación de los eventos y grupos.
No obstante, la firma mantiene la cautela sobre el grupo hotelero "dado el riesgo de tendencia a la baja en la segunda mitad de año".
Para la segunda parte de 2023, el escenario base de estos expertos contempla una recesión, con una menor ocupación hotelera y precios más bajos. "Esto dará lugar a un EBITDA de 400 millones, frente a los 427 millones que estima el consenso, y a una deuda neta en relación con el EBITDA de 4,7 veces", detallan.
"Somos cautelosos sobre la exposición de Meliá al ocio (70% de las ventas), que se ha beneficiado de la demanda acumulada en 2022, pero que prevemos vulnerable a la caída del comercio y las presiones de los consumidores", añaden.
Si no hay recesión en 2023, la ocupación podría recuperarse hasta el 69% (frente al 71% de 2019), con un crecimiento de precios de alrededor del 5%, dicen estos expertos. "En este escenario, la compañía podría generar un EBITDA de alrededor de 500 millones, que está un 20% por encima del consenso, y la deuda neta en relación con el EBITDA caería a 2,9 veces en 2023", anticipan.
Jefferies tiene actualmente un consejo de 'mantener' sobre Meliá, con un precio objetivo de 5,80 euros, muy cercano a los niveles actuales de cotización de la compañía. Según estos analistas, el negocio de la hotelera sigue estando muy apalancado, con poco visibilidad sobre el calendario de enajenación de activos.