El directivo compagina la tarea de ser CEO de dos cotizadas
La agenda de Jack Dorsey, CEO de Twitter, es posiblemente una de las más apretadas de los directivos de Silicon Valley. Además de la red de microblogging, está bajo su responsabilidad Square, su compañía de pagos móviles.
El presidente ejecutivo de la junta directiva de Twitter, Omid Kordestani, fue incapaz de encontrar un hueco para su reunión semanal con Dorsey, por lo que acabó ofreciéndose para ser su chófer. Esta imagen representa bastante bien las exigencias a las que está sometido el directivo, señala The Wall Street Journal.
A sus 39 años, Dorsey se enfrenta a la tarea de dirigir al mismo tiempo dos compañías que cotizan en Wall Street. Su regreso oficial como máximo responsable de Twitter en octubre y la reciente salida a bolsa de Square hace un mes recuerdan a grandes figuras de las tecnológicas estadounidenses, como Steve Jobs, que compatibilizó Apple y Pixar, y Elon Musk, CEO de Tesla Motors y Space Exploration Technologies.
Sin embargo, Musk no es partidario de esta situación: “No recomendaría dirigir dos compañías”. Musk hizo estas declaraciones en una conferencia en octubre, en la que aseguró que esta situación “realmente reduce mucho tu libertad”. De hecho, el directivo ya ha manifestado su intención de dejar las operaciones diarias en Tesla.
Twitter está intentando convencer a los inversores de que tiene atractivo para una gran audiencia
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SITUACIÓN DELICADA PARA TWITTER Y SQUARE
Jack Dorsey no está casado ni tiene hijos, pero tampoco tiene tiempo libre, ya que tanto Twitter como Square atraviesan momentos delicados. La red de microblogging está intentando convencer a los inversores de que tiene atractivo para una gran audiencia. Al mismo tiempo, Square debe demostrar que puede expandirse más allá del sector de pagos electrónicos.
Las acciones de Twitter se encuentran en mínimos después de caer en torno a un 15% desde el nombramiento de Dorsey como CEO. Por su parte, las acciones de Square han subido casi un 36% desde el 19 de noviembre, fecha en que salieron a bolsa, coincidiendo precisamente con el cumpleaños de Dorsey, pero aún están por debajo del precio que pagaron los inversores privados el año pasado.
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“Un presidente ejecutivo clásico debería inmiscuirse en todo: finanzas, operaciones, personal”, señala Eric Flamholtz, profesor emérito de la Escuela de Gestión Anderson de la Universidad de California en Los Ángeles, en declaraciones a Wall Street Journal. “Pero si usted está dividiendo su tiempo entre dos compañías, las personas que lo rodean adquieren una mayor relevancia”, asegura.
Pero no todos comparten esta visión. “La gestión de múltiples empresas es el camino equivocado para abordar el desafío”, opina Suhail Rizvi, cuya firma, Rizvi Traverse Management LLC, es inversora tanto de Twitter como de Square. “La clave es si Twitter podrá seguir desarrollando nuevos productos y captar a los mejores talentos. Estas son las áreas en las que Jack sobresale”.
Parece que, por el momento, Jack Dorsey se está ajustando a un horario meticuloso con largas jornadas de trabajo. Según Wall Street Journal, fuentes de Twitter y de Square aseguran que trabaja hasta 18 horas al día y que pasa las mañanas en Twitter y las tardes en Square, cuyas sedes se encuentran a escasa distancia en San Francisco.
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