El CEO de la entidad ve "prematuro" hablar del nuevo Gobierno tras el resultado electoral poco claro
El consejero delegado de Banco Santander, Héctor Grisi, ha vuelto a mostrar la postura crítica de la entidad respecto al impuesto extraordinario a la banca implantado por el Gobierno de Pedro Sánchez. "Un impuesto a la banca no es la manera de ayudar a la economía. Necesitamos bancos rentables", ha dicho en respuesta a las múltiples preguntas formuladas por los periodistas sobre este asunto en la rueda de prensa para explicar los resultados del primer semestre y del segundo trimestre del año.
Grisi ha detallado que, del beneficio del banco anualmente, un tercio se dedica a reinvertir en el propio negocio, un tercio es remuneración a accionistas y otro tercio se destina al pago de impuestos.
"Nosotros consideramos que pagamos adecuado. El impuesto a la banca es discriminatorio porque penaliza al sector y los bancos ya pagamos muchos impuestos", ha remarcado. "Los gobiernos necesitan recaudar muchos impuestos, pero las empresas tenemos que pagar todos lo mismo".
A las preguntas sobre la opinión de Santander respecto a la situación política en España tras las elecciones del pasado domingo, que han dejado al país pendiente de las negociaciones para conseguir formar gobierno, Grisi ha dicho que es "prematuro" hablar del nuevo Gobierno precisamente porque no hay un resultado claro.
"Vamos a seguir haciendo lo que tenemos que hacer, trabajar para apoyar a familias y empresas y ayudar al crecimiento económico del país. Seguimos trabajando con los gobiernos elegidos por los ciudadanos, y así lo seguiremos haciendo", ha indicado.
En todo caso, el banco no está preocupado por un hipotético bloqueo político ya que, como ha indicado José García Cantera, director financiero, la economía española es la que más va a crecer de entre las cinco grandes economías europeas, con una previsión superior al 2% para este año. "La economía tiene una inercia positiva que debería continuar. España en general lo está haciendo bien y esperamos que esta inercia siga", ha expresado.
El CEO de Santander ha hecho especial hincapié en la labor que está desarrollando el banco para simplificar el negocio, a la vez que se aprovechan las fortalezas globales. Ha destacado los cambios estructurales hacia un modelo "mucho más simple", que están haciendo que el banco sea "mucho más eficiente en el futuro". Esto se traduce en la fortaleza del balance, en la confirmación de que se van a alcanzar los objetivos para 2023 y en la remuneración al accionista, con el 50% del payout.
"Santander quiere hacer sus productos mucho más amigables y sencillos para los clientes", ha afirmado. En lo que va de año, la oferta de productos se ha reducido en 362, lo que equivale a un 5% menos que a cierre de 2022. También se han generado sinergias y eficiencias de 70 millones en Estados Unidos y se han recortado costes por uso de tecnología en 80 millones de euros.
Grisi ha remarcado que el objetivo de Santander es convertirse en el banco número uno, "donde el cliente tiene su nómina, hace sus pagos y nos deja flujos en sus cuentas debido a ello. Ese es el cambio importante que estamos viendo".
El CEO de Santander confía en que todos estos cambios se acaben reflejando en la evolución de la acción. Así, ha dicho que el banco hace por su parte todo lo que puede para mejorar la rentabilidad para el accionista, pero que la evolución de los títulos no la puede controlar. "Creemos que la acción tiene que reaccionar a esto. Todos los bancos en Europa, desafortunadamente, tenemos una valoración por debajo del valor en libros. Queremos que los inversores regresen a este tipo de activos".
Héctor Grisi ha respondido también preguntas relacionadas con otros asuntos, como la remuneración de los depósitos, la evolución de la morosidad o la marcha del negocio en España.
Sobre el primer aspecto, ha afirmado que no puede decirse que Santander no esté remunerando el ahorro, aunque ha reconocido que hay mucha competencia en España. Asimismo, ha querido remarcar que los bancos españoles dan el crédito más barato que la media de países europeos.
Sobre la evolución del crédito en nuestro país, la "tendencia es clara", afirma. "Ha venido cayendo porque la demanda de crédito, cuando los tipos de interés suben, se retrae. En hipotecario, hemos venido viendo una caída en la demanda de crédito, al tiempo que muchos más prepagos de los que veíamos anteriormente, cinco veces más prepagos".
En cuanto a la evolución general del negocio en España, se han mostrado satisfechos, pero indican que también lo están con la de otros mercados, como Brasil. Grisi ha señalado que "España viene bien y con buena dinámica, pero hay otros países que también tienen buena dinámica". En el primer semestre, el beneficio atribuido en España aumentó un 74%, en euros constantes, hasta 1.132 millones, mientras que el de Brasil cayó un 40%, hasta 823 millones.
Respecto a la morosidad, que se ha mantenido estable en el 3,07% al termino del primer semestre, el banco ha reconocido que se viene normalizando (subiendo), especialmente en EEUU, porque en tiempos de Covid había muchas ayudas del Gobierno que ya no hay. Es por ello que están provisionando más en EEUU. Sin embargo, no es un proceso que les cause preocupación.
En España, la evolución de la economía nacional hace que la morosidad tampoco sea una preocupación. "(La evolución económica) es muy, muy buena y no pensamos que el coste de riesgo se vaya a complicar en la segunda mitad. No vemos una situación en la crezca el coste de riesgo, vemos la mora bien contenido. Todo indica que vamos a tener un muy buen segundo semestre del año", ha anticipado Grisi.
Finalmente, sobre test de estrés a la banca europea, cuyos resultados se conocerán este viernes, Santander prevé un buen resultado, mejor que la media de los bancos europeos.