La firma española controla el 25% del operador privado encargado de la gestión
No respetaba el Acuerdo de París
El Tribunal de Apelación de Inglaterra (Court of Appeal) ha declarado que la ampliación del aeropuerto de Heathrow es ilegal porque el Gobierno de Reino Unido no tuvo en cuenta el Acuerdo del Clima de París. Tras la lectura de la sentencia, el Gobierno ha aceptado la sentencia y ha anunciado que no apelará.
Esta decisión tiene repercusión más allá de las fronteras británicas. La española Ferrovial controla el 25% del operador privado Heathrow Airport Holdings Limited, encargado de la gestión del aeropuerto. Una noticia que no ha tenido una buena acogida en el parqué, a estas horas del jueves sus acciones se han dejado un 3,83%.
Con la decisión de la justicia británica es probable que la expansión del aeropuerto londinense no pueda seguir adelante ya que el segundo tribunal más alto de Reino Unido ha señalado que el Ejecutivo no tuvo en cuenta sus compromisos bajo el Acuerdo de París.
Se trata de una sentencia que no tiene precedentes, es la primera que expone que el Acuerdo de París puede ser utilizado en los tribunales. Además, esta decisión podría afectar a otras expansiones en otros aeropuertos del Reino Unido.
En España está previsto llevar a cabo ampliaciones en los aeropuertos de Madrid, Barcelona y Palma de Mallorca y construir un nuevo aeropuerto en Huelva. La sentencia abre la puerta a que el Acuerdo del Clima de París, de obligado cumplimiento para las partes firmantes y España es una de ellas, pueda servir para impugnar estos proyectos.
Para la abogada internacional y participante en las negociaciones del clima de Naciones unidas, Farhana Yamin, ha celebrado que el juicio "muestra que el espíritu y la letra del Acuerdo de París deben ser respetados y que los gobiernos, empresas e inversores deben ahora urgentemente reevaluar y reconciliar sus planes con el límite de temperatura de 1.5°C".
"Cualquier otra cosa significará que no están salvaguardando el futuro de sus ciudadanos y de sus jóvenes. La decisión del Tribunal de Apelación allana el camino para que el Gobierno del Reino Unido muestre un verdadero liderazgo en la COP 26", ha manifestado.
Por su parte, el exdiputado conservador y asesor climático de la exprimer ministra Theresa May Lord Randall de Uxbridge considera que esta es "una oportunidad" para Boris Johnson para dejar a un lado la expansión de Heathrow y centrarse en el evento diplomático más importante de su Gobierno, que será la XXVI Cumbre del Clima que se celebrará en Glasgow a final de año.
"Es su oportunidad de brillar en el escenario mundial. Al elegir aceptar la decisión del tribunal, Boris está enviando una señal de que UK plc puede prosperar sin expandir los aeropuertos o romper nuestros compromisos sobre la crisis climática", subraya.
Por su parte, la jefe de administración en Sarasin & Partners Asset Managers, Natasha Landell-Mills, afirma que la decisión del Tribunal de Apelación "cambia el juego" ya que supone que los Gobiernos ya no pueden hacer "caso omiso" de sus propios compromisos en el marco del Acuerdo de París a la hora de aprobar grandes proyectos de infraestructuras.
"Esta decisión es un paso vital para ayudar a desplazar el capital de las actividades que dañan nuestro clima hacia aquellas que lo estabilizan", añade.
Finalmente, la profesora adjunta de derecho internacional público de la Universidad de Leiden, opina que aunque la sentencia se refiere a políticas nacionales del Gobierno del Reino Unido, sus implicaciones son globales. "Por primera vez, un tribunal ha confirmado que el objetivo de temperatura del Acuerdo de París de hacer esfuerzos para mantener el calentamiento por debajo de 1,5C tiene efecto vinculante", celebra.
De este modo, observa que la decisión del Tribunal de Apelación podría "inspirar litigios similares en otros países que han firmado el Acuerdo de París, pero que convenientemente ignoran su objetivo de temperatura cuando aprueban proyectos de gran consumo de carbono o promulgan políticas de energía sucia".
El desarrollo de la expansión del aeropuerto de Heathrow fue una declaración de política nacional votada por el Parlamento, tal y como exige la Ley de Planificación de 2008.
En mayo de 2019, se presentaron al Tribunal Superior cinco revisiones judiciales separadas de la decisión del Gobierno, que fueron desestimadas. Fueron presentados por el alcalde de Londres, Heathrow Hub Limited, varios distritos de Londres (incluidos Wandsworth y Richmond), Greenpeace, Amigos de la Tierra y la organización benéfica especializada en litigios sobre el clima, Plan B.
Un mes más tarde, estas revisiones fueron aceptadas para impugnar la decisión del Tribunal de Apelación. La audiencia se inició en octubre de 2019 y ha terminado este 27 de febrero con la lectura de la sentencia que ha sido aceptada por el Gobierno británico que ha mostrado su intención de no recurrir.