El consejero delegado de Siemens Gamesa, Marckus Tacke, ha mostrado su confianza en poder "explorar futuras oportunidades para trabajar con Iberdrola", a pesar del acuerdo alcanzado por la energética con Siemens para salir del accionariado del fabricante de aerogeneradores con la venta de su participación del 8% por casi 1.100 millones de euros, y estima unas potenciales sinergías de 100 millones de euros por el estrechamiento de la relación con Siemens AG.
En un comunicado remitido por la compañía, Tacke señala su deseo de "ampliar la larga y constructiva relación" con Iberdrola y se muestra complacido por "haber firmado un acuerdo para cooperar en el futuro" con el que será su antiguo accionista. "Iberdrola ha sido pionera y visionaria en el sector de las renovables, así como un valioso cliente y socio de Siemens Gamesa", dijo.
Asimismo, estima el potencial de trabajar "más estrechamente con Siemens AG", que pasa a ser el único accionista de referencia en Siemens Gamesa, y que permitirá capturar "los 100 millones de euros de sinergias señaladas en el anuncio que se hizo ayer".
A este respecto, señala que una cooperación más estrecha en áreas como la cadena de suministro "solo puede ser beneficioso para Siemens Gamesa, nuestros clientes y nuestros accionistas". "Nuestro equipo se compromete a ofrecer ese valor a nuestros grupos de interés", añadió al respecto.
Iberdrola alcanzó este martes un acuerdo con Siemens para la venta de la totalidad de su participación del 8,07% en Siemens Gamesa por un importe de 1.099,545 millones de euros.
En concreto, el acuerdo representa un precio equivalente de 20 euros por acción de Siemens Gamesa y la compraventa se consumará este miércoles, añadió la compañía.
El grupo presidido por Ignacio Sánchez Galán señaló que este precio no está sujeto a ajustes en el futuro y que el impacto de esta desinversión en los estados financieros consolidados de la energética del ejercicio 2020 "se determinará e informará más adelante".
De esta manera, Iberdrola y Siemens ponen fin a los desencuentros surgidos desde meses después de que se cerrara, en abril de 2017, la fusión entre Gamesa y la división eólica de Siemens por la gestión de la alemana al frente del fabricante de aerogeneradores.