Tras esta decisión, la viabilidad de ambas entidades está en tela de juicio
Deutsche Bank y Commerzbank han roto finalmente las conversaciones que mantenían para llegar a una fusión. Tras esta decisión, el futuro de ambas entidades está en tela de juicio ya que la situación de las dos es más que complicada.
Estaba previsto que Deutsche Bank ofreciera novedades sobre esta operación este mismo viernes, día en el presenta sus resultados, sin embargo varios medios indicaban a primera hora de este jueves que ambas partes estaban lejos de llegar a un acuerdo.
El presidente de Deutsche Bank declaró a finales que marzo que el banco informaría a los inversores sobre sus conversaciones con Commerzbank en el momento en el que comunicara sus beneficios. Las negociaciones entre ambas entidades habían entrado en su sexta semana y habían recibido desde el principio el apoyo del Gobierno germano quien, sin embargo, no vería con tan buenos ojos el interés de UniCredit o de ING en Commerzbank.
Deutsche Bank ha sufrido una serie de golpes -desde las costosas investigaciones legales hasta la pérdida de mercado en negocios que antes dominaba- que han alimentado la preocupación por su estrategia independiente. El crecimiento de Commerzbank en el abarrotado mercado bancario alemán también ha sido cuestionado.
Ambos bancos han decidido abandonar sus planes porque un acuerdo no crearía los beneficios suficientes para compensar los riesgos de la ejecución, los costes de reestructuración y los requisitos de capital asociados a una integración a tan gran escala. Deutsche Bank ha anunciado que seguirá revisando todas las alternativas para mejorar su rentabilidad a largo plazo y la rentabilidad para los accionistas, y ha adelantado algunas pinceladas de los resultados que comunicará mañana, con una mejora en relación al CET1, destacan los expertos de RBC.
Sobre la posibilidad de que UniCredit o ING se hagan con Commerzbank, estos analistas prefieren que desistan de su empeño. "Preferiríamos que la dirección de UniCredit siguiera centrándose en la reducción del riesgo de su cartera de productos no básicos y en la reducción de costes orgánicos. En el caso de ING, consideramos que la estrategia de liderazgo digital del banco es un diferenciador clave y preferiríamos que continuara su camino de crecimiento orgánico, tal como se esbozó durante el Día del Inversor del mes pasado", señalan desde RBC.