Como condición para seguir adelante con su ampliación de 500 millones
Mikhail Fridman, máximo accionista de DIA con el 29% del capital, exigirá a la Junta de Accionistas de la cadena de supermercados que su iniciativa para ampliar capital por valor de 500 millones de euros se realice a un precio mínimo de 0,10 euros por acción. También ha pedido aplazar cualquier pago a la banca acreedora "al menos hasta marzo de 2023".
Así lo acaba de comunicar DIA a la Comision Nacional del Mercado de Valores (CNMV) mediante un hecho relevante. LetterOne, el fondo de inversión de Fridman, ha solicitado a la compañía añadir un nuevo punto en el orden del día de la Junta de Accionistas que se celebrará el próximo 20 de marzo.
En este nuevo punto, se especifica que la ampliación de capital por valor de 500 millones de euros se realizará "mediante la emisión y puesta en circulación de nuevas acciones ordinarias ... con reconocimiento del derecho de suscripción preferente y con un precio mínimo de 0,10 euros por acción (nominal más prima, si fuera de aplicacion)".
Además, el nuevo punto del orden del día especifica que la ampliación de 500 millones está sujeta a varias condiciones: "Que se produzca la liquidación de la opa de LetterOne sobre la totalidad de acciones" de DIA, que se produzca "el nombramiento de una mayoría de miembros del Consejo propuestos por LetterOne" y que "se alcance un acuerdo entre la sociedad y los acreedores de la deuda bancaria en relación con una estructura de capital viable a largo plazo".
En este sentido, LetterOne considera fundamental aplazar "una extensión de todas las obligaciones de pago frente a los bancos acreedores hasta al menos el final del mes de marzo de 2023".
LA POSTURA DEL CONSEJO
Desde el Consejo de Administración, contrario a la ampliación de capital de Fridman y que apuesta por otra ampliación de 600 millones, tienen previsto realizar antes una reducción del capital para rebajar el valor nominal de las acciones de 0,10 euros a 0,01 euros. Ese sería, por tanto, el precio mínimo al que podría hacer la ampliación, que ya está asegurada por Morgan Stanley, con el consecuente perjuicio por dilución para sus accionistas y, sobre todo, para el 29% de Mikhail Fridman.
Si el consejo logra que los accionistas aprueben la operación y la pone en marcha, la participación de LetterOne se diluiría y podría desistir de su oferta para acabar saliendo de la compañía con fuertes pérdidas. Además, el Consejo plantea el pago de 100 millones de euros a la banca acreedora, algo que no contempla el inversor ruso. Esos fondos saldrán de la venta de la cadena de perfumerías Clarel y de la enseña mayorista Max Descuento. A cambio, la banca ha aceptado aplazar hasta 2023 el vencimiento de 765 millones de euros de deuda.