La inversión se distribuye en 1.052.550 acciones de forma indirecta
Fidelity ha elevado su participación en el capital de la socimi Árima Real Estate hasta el 3,7%, después de que el banco suizo J. Safra Sarasin (JSS) lanzase una oferta pública de adquisición de acciones (OPA) voluntaria para comprar la empresa por cerca de 245 millones de euros.
Según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el mismo día en el que los suizos lanzaron la OPA, el pasado jueves 16 de mayo, la gestora estadounidense aumentó del 3,55% hasta el 3,7% su presencia en el capital de Árima.
Ese mismo día, el hedge fund francés Syquant Capital también afloró una participación del 1,2% en el accionariado de la socimi, pasando a tener el control de 350.000 acciones de Árima, valoradas en cerca de 3 millones de euros.
En cuanto a la presencia de Fidelity, su inversión se distribuye en 1.052.550 acciones de forma indirecta, valoradas en cerca de 9 millones de euros.
El actual principal accionista de Árima es la firma de inversión canadiense Ivanhoe Cambrigde, que controla el 20,3% de las acciones, seguido del empresario Víctor Urrutia (propietario de los vinos CVNE), con el 7,9% del capital; y del fundador, consejero delegado y vicepresidente de la socimi, Luis López de Herrera Oria, que mantiene una participación del 5%.
En el capital de la socimi también están los fondos internacionales Thames River (5%), así como la empresa de inversión familiar con sede en Madrid Torrblas, con otro 5% del capital, participada por Ana Patricia Torrente Blasco.
El precio ofertado en la OPA de 8,61 euros supone una prima del 38,9% sobre el precio al que cerraron el día previo al anuncio los títulos de Árima (6,20 euros por acción) y del 40,51% sobre el precio de cotización medio ponderado por volumen en el último mes. No obstante, a la acción todavía le queda un recorrido del 4% para llegar al precio de la OPA.
La entidad financiera suiza tiene la intención de que las acciones de Árima continúen cotizando en las bolsas de valores españolas y no tiene previsto promover o proponer su exclusión de negociación.