El hermano del presidente cree que Ayuso y Bergareche no tienen carácter independiente
Leopoldo del Pino, accionista de Ferrovial con el 5% del capital, pidió por carta a su hermano y presidente, Rafael del Pino, que la junta de accionistas que el grupo celebraba este viernes no reeligiesen en los puestos de consejeros y vicepresidentes a los exconsejeros delegados de la compañía Santiago Bergareche y Joaquín Ayuso. No lo ha conseguido. La compañía ha respaldado a los dos consejeros, que continuarán en el grupo tres años más.
MAYORÍA FAVORABLE
En la junta de accionistas, Ferrovial sometió a votación la idoneidad de la continuación de Bergareche y Ayuso como consejeros delegados de la compañía. El resultado de la asamblea ha sido favorable y, por tanto, determinante.
Junto a Bergareche y a Ayuso, han renovado en su cargo ocho consejeros delegados, incluyendo dos hermanos Del Pino Calvo-Sotelo, María y Joaquín.
Leopoldo del Pino es el único hermano que no está en el consejo de Ferrovial, después de que en enero de 2016 dejara su sillón en este órgano de gestión también por carta y alegando motivos personales. No obstante, lo hizo días después de vender un 4,15% del capital social de Ferrovial, la mitad de la participación que entonces tenía en el grupo que fundó su padre.
El punto de las votaciones sobre la reelección de consejeros acaparó así toda la atención de la junta de Ferrovial después de que en las horas previas transcendiera el cruce de cartas entre el hermano del presidente y la empresa en relación a la conveniencia de la continuidad de los referidos dos consejeros.
CRUCE DE CARTAS
En su misiva, Leopoldo del Pino argumentaba que Ayuso y Bergareche "exceden con creces el plazo de permanencia máximo de doce años previsto en la ley para los consejeros independientes". "De hecho, al término del mandato para el que se les propone ahora, sumarían una permanencia entre 20 y 23 años en el cargo", indicaba Leopoldo Del Pino.
Además, en el caso de Bergareche, cuenta con 73 años de edad, con lo que contradice lo que indica en el reglamento del consejo, que fija un máximo de 72 años para ejercer como consejero.
"No hay que olvidar, además, que se incorporaron a Ferrovial en 1982 y 1995, respectivamente, por lo que la incertidumbre sobre su independencia que se deriva de la larguísima permanencia en sus cargos se une a los vínculos y estrechas relaciones personales que puedan existir entre ellos y los miembros del equipo directivo de la sociedad, con los que han trabajado a lo largo de los años", añade.
"PERMANENCIA ENRIQUECEDORA"
En su respuesta, Ferrovial defiende el "profundo conocimiento de la compañía" con que Bergareche y Ayuso cuentan, "no solo por sus años de pertenencia al consejo, sino también por el desempeño de puestos ejecutivos en el grupo". Por ello, asegura que su "permanencia en el consejo se considera muy enriquecedora".
Tras detallar los cambios registrados en el máximo órgano de gestión del grupo en los últimos años, y la incorporación de independientes, Ferrovial estima que el hecho de que los dos exconsejeros delegados "no puedan clasificarse bajo la categoría de independientes no se ha considerado relevante a los efectos de su reelección".
A pesar de esta respuesta, con fecha de este jueves, 4 de abril, la reelección de ambos en sus puestos de consejeros y vicepresidentes de la compañía se someterá a la votación de la junta que tiene lugar esta mañana.