Ferrovial se adjudica un contrato de al menos 1.800 millones en la alta velocidad británica

En consorcio con la británica BAM Nuttall

Bolsamanía
Europa Press | 29 nov, 2024 11:27 - Actualizado: 11:55
ep archivo   el presidente de ferrovial rafael del pino en una imagen de archivo
El presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, en una imagen de archivo.Alberto Ortega - Europa Press - Archivo

Ferrovial SE

39,020

17:29 29/11/24
0,41%
0,16

Ferrovial se ha adjudicado un contrato en Reino Unido, en consorcio con la británica BAM Nuttall, para construir las vías de la alta velocidad entre Londres y Birmingham por un importe de al menos 1.500 millones de libras (1.800 millones de euros), según su valor en 2020.

El consorcio supervisará el diseño y la construcción de la infraestructura de vías, gestionará la logística de la construcción y acometará la fase de pruebas y puesta en marcha, según ha informado HS2, el promotor de la segunda línea de alta velocidad del país.

Los trabajos incluyen la ruta desde Old Oak Common (Londres) hasta la terminal en Birmingham Curzon Street, una estación esta última cuyas obras también están en manos españolas a través de Dragados, la constructora de ACS, que se encargará además de la construcción de la terminal Euston de Londres.

Ferrovial también se encargará del diseño y la construcción del depósito de mantenimiento de la infraestructura en Calvert, la interfaz con el depósito de mantenimiento de trenes de Washwood Heath y la conexión permanente a la red ferroviaria existente en Handsacre Junction.

La compañía de Rafael del Pino ya estaba presente en este proyecto de alta velocidad, después de que en 2020 adquiriese una participación del 15% en un consorcio liderado por la francesa Eiffage para otros trabajos en un tramo de 80 kilómetros.

Las empresas españolas tenían grandes esperanzas en este gran proyecto británico, hasta que el exprimer ministro, Rishi Sunak, decidiese cancelar todos los tramos más allá de Birminghan por el alto coste de la infraestructura, aunque el equipo del nuevo primer ministro, Keir Starmer, baraja reactivarlo.

contador