Standard & Poors indica que la compañía ha reducido "continuamente" su deuda neta en los últimos 18 meses
La agencia de calificación de riesgo Standard & Poors (S&P) ha elevado la calificación crediticia de Repsol un escalón, desde 'BBB-' a 'BBB', con perspectiva 'estable'. S&P mantenía esta calificación de BBB-, a un nivel del 'bono basura', desde 2012. Además, es la primera mejora que recibe de cualquier agencia desde 2014. Tras conocerse esta noticia, las acciones de la petrolera han cerrado con una subida de un 1,87%, hasta 15,26 euros.
A través de un comunicado, Standard & Poors indica que Repsol ha reducido "continuamente" su deuda neta en los últimos 18 meses, lo que combinado con su fortaleza de generación de flujo de efectivo le permite contar con unas métricas crediticias acordes con una calificación de 'BBB'. La agencia de calificación valora así el esfuerzo de desinversiones realizado por la compañía, que le ha llevado a reducir su deuda financiera neta a cierre del pasado mes de septiembre por debajo de los 7.000 millones de euros, así como su modelo de negocio integrado.
"Hemos observado un sólido desempeño operativo continuo, especialmente derivado del segmento downstream (el suministro y trading de crudos, el refino de petróleo y la comercialización de productos petrolíferos), y esperamos que esto continúe en 2018", indica la agencia. Standard & Poors señala que la perspectiva 'estable' de la calificación refleja su opinión de que seguirá siendo cautelosa en sus inversiones y en el pago de dividendos, de acuerdo con las condiciones de mercado.
Desde su punto de vista, la situación de Repsol "se ve reforzada por la revisión sobre el precio del petróleo Brent, que proporciona un apoyo adicional". El pasado mes de julio, la agencia ya había mejorado la perspectiva sobre la petrolera española de 'estable' a 'positiva', abriendo así la puerta a una subida de la nota. "Con base en las condiciones actuales del mercado y una política financiera favorable, estimamos que los flujos de fondos operativos de Repsol estarán por encima del 40% de su deuda en los próximos dos años, y consideramos que este nivel es acorde con su perfil de riesgo financiero", afirma Standard & Poors.
La agencia añade que "un repunte en los precios del petróleo aumentaría el apetito de la compañía hacia una mayor inversión de capital (capex) y pago de dividendos, algo que podría llevarnos a requerir métricas crediticias más fuertes para la actual calificación 'BBB'". Sin embargo, en esta etapa, la agencia calificadora no anticipa un rebote en los precios del petróleo por encima de 55 dólares por barril en los próximos años.