Esta cifra supone un incremento del 10% respecto año anterior y un 47% de todas sus inversiones
Endesa, a través de su filial de Redes, e-Distribución, destinará una inversión de 418 millones de euros a la infraestructura y el desarrollo de redes digitales que favorezcan el proceso de electrificación, lo que favorecerá el proceso de autoconsumo, las renovables y la movilidad eléctrica. Esta cifra supone un incremento del 10% respecto año anterior y representa el 47% de todas las inversiones realizadas por Endesa en el área de distribución durante el pasado ejercicio, que sumaron 889 millones.
La electrificación es, por tanto, clave para reducir la dependencia de los combustibles fósiles y recortar las emisiones contaminantes. Gracias a esta medida, Endesa refuerza su intención de desarrollo de redes inteligentes.
Además, la empresa también ha ampliado y mejorado las infraestructuras ya existentes con 8 nuevas subestaciones y más de 1.300 kilómetros de líneas nuevas y reformadas dentro de su extensa red. Endesa prevé invertir 2.600 millones de euros en sus redes de distribución entre 2023 y 2025, de los que el 42% se destinarán a su digitalización con el fin de mejorar la actuación sobre el terreno, la interacción con el cliente y el mantenimiento y la operación de la red.
En cuanto a la digitalización y automatización de la red, Endesa ya había instalado más de 33.000 telemandos Media Tensión, que permiten realizar maniobras por control remoto desde los Centros de Control de Endesa sin necesidad de desplazar equipos al terreno para resolver incidencias. El ahorro de tiempo en el desplazamiento de equipos y en la detección de incidencias se traduce en una reducción media del 20% en el tiempo de interrupción del suministro eléctrico a los clientes. De estos telemandos, 4.200 han sido desplegados en el último año con una inversión cercana a los 100 millones de euros.
Esto ha permitido que en el año 2022 se hayan ejecutado más de 1,6 millones de maniobras en remoto o automáticas para garantizar el suministro eléctrico.
Por otra parte, Endesa también ha instalado dispositivos Low Voltage Supervisor (LVS) en los centros de transformación. Estos dispositivos recogen información de la red como niveles de tensión, intensidad o temperatura para mejorar la gestión de las infraestructuras, detectar fraudes, evaluar la capacidad disponible para conectar nuevos suministros, reducir el tiempo de las reparaciones y analizar incidencias para identificar problemas en la red y evitar futuras averías.
En cuanto a los operarios de campo, se ha implantado la aplicación Smart Execution, que permite digitalizar, automatizar y controlar en forma remota las actividades que se realizan sobre el terreno, desde la preparación, ejecución, seguimiento, control y certificación de los trabajos, facilitando el cumplimiento de las medidas de seguridad.
Además, la compañía eléctrica ha reforzado y ampliado las instalaciones existentes, que actualmente llevan electricidad a 12,64 millones de clientes, 58.000 más que en 2021, y distribuyen 131,8 GWh de electricidad, un 0,5% más que en el ejercicio precedente.
En 2022, E-distribución puso en servicio ocho nuevas subestaciones y reformó 125 alcanzando una cifra total de 1.331 repartidas por Andalucía, Aragón, Baleares, Canarias y Cataluña. También se incorporaron y reformaron más de 1.300 kilómetros de líneas, que elevan la extensión de las líneas gestionadas por E-distribución a 317.829 kilómetros.