La orden de compra se realizó el 30 de septiembre, según los sindicatos
Endesa ha adquirido recientemente un nuevo cargamento de carbón para poder utilizarlo en la central térmica qua la compañía posee en la localidad gallega de As Pontes de García Rodríguez (A Coruña) y poder así hacer frente a posibles necesidades energéticas invernales.
Así lo han confirmado fuentes sindicales a 'Europa Press', que han precisado que la adquisición se cerró el pasado 30 de septiembre y que dicho mineral llegará como está previsto al puerto exterior de Ferrol, donde la empresa tiene una terminal de descarga, el próximo mes de noviembre, para posteriormente ser transportado por carretera hasta unas instalaciones próximas a la propia central térmica.
La filial de Enel, que no ha ratificado públicamente la compra, simplemente ha indicado que "está analizando diversas opciones para atender los requerimientos del operador del sistema en caso de un invierno extremadamente crudo o de alteraciones en el mercado internacional del gas".
Los sindicatos detallaron al mismo medio que con esta nueva compra de carbón, de un mínimo de 60.000 toneladas, se abre también un nuevo escenario en este complejo industrial, ya que "nos interesa que se nos concrete en que se va a traducir, en cuanto a carga laboral, esta medida", han indicado.
La central de As Pontes sigue operativa y a disposición del Ministerio de Transición Ecológica y del operador del sistema (Red Eléctrica) mientras la misma compañía no reciba la confirmación administrativa de su cierre definitivo, algo que no prevé hasta finales de 2021 o principios del 2022.
Esta central requirió quemar carbón el pasado mes de enero para atender las necesidades energéticas que la borrasca 'Filomena' provocó en el país.
Curiosamente, el Gobierno y las empresas del sector han puesto fecha de caducidad a este tipo de energía en nuestro país por tratarse de un combustible fósil que emite grandes cantidades de CO2 a la atmósfera y la intención del propio Ejecutivo, con su Plan de Energía y Clima, es sustituirla por otras fuentes de generación no emisoras, como la eólica o la fotovoltaica.