"Estamos atemorizados por lo que pueda pasar el día 21 y que Barcelona quede tan tocada como el año pasado", confiesan desde Empresaris de Catalunya
El día de la marmota que vive la política catalana, con una nueva escalada de tensión entre los Ejecutivos central y autonómico por la celebración del Consejo de Ministros del 21 de diciembre en Barcelona, ha vuelto a poner al empresariado catalán en alerta. Además de Foment del Treball, Pimec y entidades como Empresaris de Catalunya, en esta ocasión los sindicatos también han alzado su voz para reivindicar seguridad jurídica, estabilidad política y cohesión social al president de la Generalitat, Quim Torra.
Temen desde los sectores del tejido productivo catalán una nueva escalada de violencia y disturbios en la capital catalana que recuerde a lo acontecido durante el referéndum ilegal del 1-O y las jornadas posteriores. "Estamos atemorizados", se queja el presidente de Empresaris de Catalunya, Josep Bou. Desde esta asociación temen que la capital catalana "quede tan tocada como el tercer trimestre del año pasado", si en plena campaña navideña se repiten los episodios de finales de 2017 ya que "amenazan de pleno la recuperación y buena marcha de los negocios en la Cuidad Condal".
Por este motivo demandan al Estado "tomar acciones para combatir la deslealtad mostrada por el Govern de Catalunya", un clima de desafío constante al Gobierno de Pedro Sánchez en el que la invocación de la 'vía eslovena' por parte de Torra es "un ejemplo más", prosigue Bou. Y ven insuficiente la celebración del penúltimo Consejo de Ministros del año en la capital catalana. Hace hincapié también el dueño de las panaderías Bou en que los Mossos d'Esquadra son perfectamente capaces de combatir la acción de los Comités de Defensa de la República (CDR), que han cortado autopistas y vías principales este fin de semana.
Los empresarios temen que la capital catalana "quede tan tocada como el tercer trimestre del año pasado", si en plena campaña navideña se repiten los episodios de finales de 2017
Estas actuaciones y la falta de contundencia de la policía catalana para frenarlas ha desencadenado la enésima crisis entre las administraciones central y autonómica y ha vuelto a agitar el fantasma de una toma de control de la región. El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha amenazado con la intervención de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en Cataluña si se repiten las protestas y ha acusado al de Torra de "dejación de funciones con consecuencias tanto de carácter económico y social como para la seguridad pública".
La manga ancha del president de la Generalitat con los CDR también incomoda a la patronal catalana, Foment del Treball. Su nuevo presidente, Josep Sánchez Llibre, ha ubicado como punta de lanza de su mandato la repatriación de las más de 3.000 empresas que abandonaron Cataluña el año pasado. Para ello, se ha propuesto generar un clima político "sin tensiones y dar tranquilidad jurídica", según él mismo ha explicado. Y las nuevas acciones de los independentistas más radicales, mientras el Govern mira hacia el otro lado incomodan a la patronal, que ve como la sociedad vuelve a tensarse.
Por este motivo, junto a los sindicatos CC.OO y UGT han reclamado "estabilidad política, económica y social" y se han comprometido a trabajar conjuntamente. El objetivo que perseguirán a través de reuniones de trabajo con interlocutores de la administración pública, desde este mes de enero, es promover un mensaje de confianza a empresarios, inversores y trabajadores.
El presidente de Pimec, Josep González, ha alertado, por su parte, de que la "escalada de declaraciones" hechas los últimos días por diferentes representantes políticos puede acabar afectando a la estabilidad económica de Catalunya, además de dificultar un acuerdo entre Catalunya y el resto de España.
APROBAR PRESUPUESTOS, LA RECETA DE LOS EMPRESARIOS
González ha reiterado la necesidad de aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE), además de los de la Generalitat, como "factor de estabilidad económica y político". La asociación que defiende las intereses de las pides en Cataluña También insiste, entre sus reivindicaciones, en que se revierta el Decreto Ley que se aprobó después del referéndum del 1 de octubre del año pasado y que facilitó el traslado de las sedes sociales de las empresas fuera de Catalunya.
Foment del Treball y los sindicatos apuntan a la misma dirección y centrarán sus esfuerzos en lograr que las fuerzas políticas del Gobierno catalán aprueben los presupuestos en el Parlament, según han informado en un comunicado.
155 SÍ, 155 NO
Sobre la posibilidad de volver aplicar el artículo 155, González no considera que se den las condiciones para ello y ha pedido responsabilidad a todos los políticos para dialogar y prevenirlo: "Aplicado con razón o sin razón sería una señal de crisis".
Bou, en cambio, pide cortar por los sano y "gobernar bien Cataluña mediante una aplicación del Artículo 155 de la Constitución 'sine die', como la única fórmula para que "vuelvan las empresas y los inversores".