Al igual que S&P Global, creen que es una regulación única en Europa
La agencia crediticia Fitch Ratings ha realizado un informe que analiza la situación del mercado eléctrico en España tras el paquete de medidas impulsadas por el Gobierno para bajar el precio de la luz, cuya conclusión es que las compañías del sector se ven "perjudicadas".
"Un paquete de medidas gubernamentales en España para reducir el impacto del aumento de los precios de la energía en las facturas de la electricidad está, en su mayoría, a expensas de las empresas de servicios públicos integradas del país, dejándolas en una desventaja competitiva frente a sus pares europeos", dicen los expertos de Fitch que, al igual que los de S&P Global, apuntan a que esta legislación es única en el continente.
Asimismo, prevén que no haya cambios en sus calificaciones debido a que la nueva norma tiene un impacto temporal, pero dicen que el margen financiero de las compañías "está bajo presión". "El impuesto sobre el gas recortará los beneficios esperados de las centrales eléctricas libres de emisiones y supone una previsibilidad significativamente menor del marco regulatorio español, debido a la interferencia política", señalan desde la agencia.
Los analistas de Fitch estiman que Iberdrola y Endesa sean las más afectadas por esta reforma impulsada por el Gobierno de Pedro Sánchez, "debido a su gran escala y a las coberturas intragrupo no elegibles realizadas a precios mucho más bajos". Por otro lado, Acciona será la que menos impacto tenga por sus acuerdos externos de compra de energía y a las coberturas financieras.
Otras empresas de servicios públicos podrían ver como sus calificaciones crediticias se ven afectadas, sobre todo si el Parlamento saca adelante la propuesta del impuesto al CO2, que tendrá un impacto de 625 millones de euros al año, según los expertos.
Este viernes se ha conocido que el Gobierno ha sacado a consulta pública la reforma de la tarifa regulada del precio de la luz, a la que se han acogido 10,7 millones de usuarios. La intención es que deje de tener la volatilidad que ha demostrado en los últimos meses por las oscilaciones del precio de la energía en el mercado mayorista.