Tras una sentencia del Juzgado de lo Mercantil número 10 de Madrid
El Mercado Alternativo Bursátil (MAB) ha suspendido la cotización de Zinkia Entertainment por "concurrir circunstancias que pudieran perturbar el normal desarrollo de las operaciones sobre los citados valores". El MAB menciona para la suspensión el "ejercicio de las funciones señaladas en los artículos 5.3 y 22 del Reglamento General del Mercado Alternativo Bursátil", por lo que el Consejo de Administración de Bolsas y Mercados Españoles Sistemas de Negociación ha acordado suspender la contratación de las acciones de la empresa.
Las acciones de Zinkia cerraron este jueves en 0,92 euros y este viernes no han marcado un nuevo precio de cotización en el MAB. El pasado miércoles, el Juzgado de lo Mercantil número 10 de Madrid adjudicó 8,2 millones de acciones de Zinkia, que representan el 33% de su capital, a Miguel Valladares, que se convierte así en el primer accionista de la productora de Pocoyó, con un 44,5%, según un auto judicial recogido por Europa Press.
En concreto, esta adjudicación estaba pendiente desde el pasado 2 de enero, fecha en la que concluyó la subasta de ejecución de bienes de Jomaca 98, por la que las acciones pasan a ser propiedad de Miguel Valladares, tras no haberse presentado ningún postor que efectuara puja alguna por este paquete de acciones.
"Con fecha 8 de junio se ha procedido al traspaso y anotación en cuenta de valores de un paquete de acciones de la sociedad de 8,25 millones de acciones hasta ahora propiedad de la entidad Jomaca 98 a favor de Miguel Valladeres", ha comunicado este viernes la compañía al MAB.
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LOS ACCIONISTAS PEDIRÁN LA DESTITUCIÓN DE JOSÉ MARÍA CASTILLEJO
Valladares quiere promover la destitución del presidente, José María Castillejo, y del actual consejo de administración
Los accionistas han explicado en un comunicado que este cambio en el accionariado permitirá que en la junta general prevista para el 14 de junio Valladares se haga con el 44,5% del capital y de los votos, lo que le permitirá pedir la destitución del presidente, José María Castillejo, y del actual consejo de administración.
Valladares, que hasta ahora contaba con una participación del 11,2% y que es titular de un crédito que adquirió a Bankia, pretende con esta medida paralizar la autorización para la puesta en marcha de una sociedad filial en Panamá por segundo año consecutivo.
Los accionistas han recordado que el año pasado, tras constituir otra sociedad en Panamá "incumpliendo los estatutos de Zinkia", un Juzgado panameño pudo paralizar la actividad de la firma y denuncian que Castillejo pretendía con esta nueva filial desviar la mitad de la actividad actual de la empresa con el único fin de buscar "opacidad fiscal y de evitar un control por parte de organismos españoles de su nefasta gestión".
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Valladares acusa a Castillejo de opacidad fiscal y de evitar el control por parte de organismos españoles de su nefasta gestión".
En concreto, la junta tiene entre los puntos del orden del día la reorganización entre sociedades del grupo de las actividades de promoción y gestión comercial de licencias de 'merchandising', la transmisión de los medios materiales y humanos necesarios para que se puedan desarrollar dichas actividades desde la sociedad filial, íntegramente participada, ZNK Pacific, o cualquier otra sociedad filial íntegramente participada por la firma.
En este sentido, la productora facultaría al consejo de administración para que proceda a adoptar los acuerdos y medidas necesarias para la ejecución de dicho acuerdo, identificando los medios materiales y humanos que deban ser objeto de transmisión Por otro lado, los accionistas han señalado que a esta adjudicación a favor de Miguel Valladares se sumará la presentada por la Fundación Santa María de los Peñones, promovida por familiares de Castillejo, por cerca de un 20% de las acciones de Zinkia.
El resto de acciones de Jomaca se encuentran pignoradas y en fase de ejecución, por lo que el actual presidente y fundador de la productora de Pocoyó, que contaba con el 64,7% del capital social, podría quedarse sin ningún título de la compañía.
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