El dueño del 20% del Atlético de Madrid estaría examinando la situación de varias entidades, entre las que estaría al alemán Postbank, según Financial Times
Wanda Group, el conglomerado del ocio y la promoción inmobiliaria controlado por Wang Jianlin, el hombre más rico de China y accionista del Atlético de Madrid, ha fijado su atención en el sector financiero europeo en el marco de sus esfuerzos para diversificar su cartera de inversiones, según informa el diario Financial Times.
Wanda Group estaría examinando la situación de varias entidades, entre las que estaría al alemán Postbank, puesto a la venta por Deutsche Bank
Según tres fuentes conocedoras de la situación consultadas por el rotativo británico, Wanda Group estaría examinando activamente la situación de varias entidades financieras del Viejo Continente, entre las que citaban al alemán Postbank, puesto a la venta por Deutsche Bank, aunque subrayaron que "esta búsqueda se encontraba en una fase preliminar y hasta ahora no se habían producido contactos oficiales con Deutsche".
A este respecto, el gigante chino ha emitido un comunicado en el que asegura que "Wanda no tiene intención de adquirir Postbank" y donde afirma que no se ha producido ningún contacto al respecto.
La adquisición de algún banco por Wanda supondría el desembarco del grupo liderado por Wang Jianlin en el sector financiero, después de haber realizado en los últimos años adquisiciones de salas de cine y estudios de producción en EEUU, fabricantes de yates en Italia y derechos deportivos yen Suiza, además de comprar el Edificio España de Madrid, que posteriormente vendió a la sociedad Baraka Global Invest, presidida por el empresario Trinitario Casanova.
De concretarse la adquisición de alguna entidad financiera, Wanda se uniría al reducido grupo de firmas chinas que han puesto un pie en el sector financiero europeo, incluyendo Fosun International, que en noviembre de 2016 se convirtió en accionista del banco portugués Millennium BCP.
Según datos de la firma Dealogic, desde 2014 Wanda Group ha invertido unos 11.800 millones de dólares (algo más de 11.000 millones de euros) en la adquisición de activos fuera de China.