El beneficio de Bankia se mantiene estable en 515 millones en el primer semestre
Bankia obtuvo en los seis primeros meses del año un beneficio neto atribuido de 515 millones de euros, de forma que lo mantuvo prácticamente estable respecto al primer semestre del pasado ejercicio, con un aumento del 0,1%. La entidad achaca este resultado a un incremento de los ingresos por comisiones por la mayor actividad comercial y, al tiempo, a una reducción de los gastos por los ahorros derivados de la fusión con BMN.
No obstante, durante el segundo trimestre el avance ha sido mayor. El banco ha señalado que ha recuperado el dinamismo de su actividad entre abril y junio, después de un primer trimestre muy centrado en la integración, y eso se ha reflejado en la evolución de beneficios en este periodo, que elevaron a 285 millones de euros, un 24,2% superior a los tres primeros del año.
El resultado del semestre se encuentra por encima de lo que preveían los analistas recogidos por FactSet hace unos días y, en opinión de los expertos de Bankinter, "bate las expectativas". Según recuerdan, estas cifras están afectadas por el cambio en el perímetro de consolidación tras la integración de BMN, que "avanza más rápido de lo esperado y permite capturar antes las sinergias de costes". Desde Renta 4 señalan que los resultados se han situado "en línea con las estimaciones en margen de intereses y comisiones netas", con un margen bruto un 2% por encima de sus proyecciones.
AUMENTO EN LOS MÁRGENES
Volviendo al primer semestre, el margen de intereses aumentó un 5,3% en el semestre a raíz de la integración y compensó la repreciación de la cartera hipotecaria y el menor rendimiento de la cartera de renta fija tras la rotación de carteras realizada en 2017 y 2018. A perímetro constante, habría caído un 9,8%, indica el banco. Mientras, el margen bruto creció un 11,8%, si bien en términos comparables habría registrado una caída del 7,5%.
Los ingresos por comisiones crecieron un 25,6%, hasta 534 millones de euros, un impulso que el banco achaca al buen dinamismo comercial de la entidad, con crecimiento en la concesión de crédito y en medios de pago. El resultado de operaciones financieras, por su parte, aumentó un 11%, hasta 291 millones.
Los gastos de explotación aumentaron en el semestre un 23,6%, hasta 944 millones de euros, pero en términos comparables se habrían reducido un 1,7% en términos comparables. De acuerdo con Bankia, tras la salida del 87,3% de las personas previstas en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), los costes se redujeron un 5,4% en el segundo trimestre respecto al primero.
Bankia vio aumentar sus clientes con nómina o pensión domiciliadas en 112.000 entre junio del año pasado y el mismo mes de este ejercicio, al tiempo que la facturación de tarjetas creció un 12% sobre el primer semestre de 2017 hasta alcanzar una cuota de mercado del 11,8%.
El volumen de hipotecas formalizadas en la entidad creció un 18,1%, el de crédito al consumo, un 34,6% y el de financiación a empresas, un 35,8%. Más concretamente, se concedieron 1.385 millones de euros en hipotecas, 1.099 millones en consumo y 7.495 millones en empresas.
El banco registró un descenso de 1.700 millones de euros en los activos improductivos en el semestre, en línea con la tendencia de trimestres anteriores y con el consiguiente descenso de la tasa de morosidad hasta el 8,1%. El banco tiene el objetivo de reducir en el año en 2.900 millones de euros sus activos improductivos.
Los riesgos dudosos descendieron en 1.309 millones de euros en el semestre, caída que se debe tanto a factores orgánicos (menores entradas en mora y gestión de las recuperaciones) como a la venta de carteras de crédito llevada a cabo. Por su parte, la tasa de cobertura se situó en el 55%.
Los activos adjudicados brutos disminuyeron en 354 millones de euros en el último semestre, hasta 4.385 millones de euros, tras haber vendido activos por importe de 309 millones en el primer semestre, un 1,4% más que en el mismo periodo del año anterior. Así, el stock de inmuebles se redujo un 10% en seis meses.
