Economía.- Los controladores califican la operación en Barajas durante la Champions de "segura, ejemplar y sin demoras"

El sindicato USCA, que representa al 90% de los controladores de ENAIRE, ha valorado este lunes positivamente la operación aérea 'Final Champions League' desplegada y ha considerado que la modificación de la planificación inicial efectuada ante el incremento de la demanda, la regulación de tráfico acertada y la apertura de un mayor número de posiciones de control han permitido "una operación ejemplar, segura y sin demoras".

La final de la Liga de Campeones de fútbol celebrada en Madrid este fin de semana ha batido récords de tráfico en el aeropuerto de Madrid-Barajas, tanto en vuelos gestionados como en asientos ofertados.

Ante este escenario, el sindicato USCA considera que las regulaciones de flujo de tráfico aplicadas por ENAIRE han sido adecuadas porque han permitido una operación "segura y con mínimas demoras".

Una situación que ha sido solventada sin problemas, destaca USCA, gracias a que "un buen número de controladores aéreos que han aceptado reprogramaciones de turnos para hacer posible el aumento en la dotación de recursos humanos y así mitigar posibles demoras".

Entre la operativa habitual y los vuelos adicionales con motivo de la Final se han gestionado 7.278 vuelos con más 1,12 millones de pasajeros en cinco días. Para atender esta demanda, tanto Madrid-Barajas como el proveedor de navegación aérea han puesto en marcha hasta este lunes, un operativo especial integrado por más de 500 personas, que se sumarán a los efectivos habituales.

Solo en la torre de control la plantilla de controladores aéreos, un 50% más de efectivos, y se ha duplicado el número de supervisores y técnicos de operaciones de navegación aérea. Asimismo, el Centro de Control de Tráfico Aéreo en Madrid abrió mayor número de sectores (posiciones de control), para gestionar la afluencia del tráfico en ruta y aproximación a Barajas, en coordinación con el centro de control colateral en Francia (Brest) por el que pasa todo el tráfico con origen y destino Reino Unido.

En este contexto, los controladores aéreos recuerdan que siempre han colaborado en los distintos eventos que han requerido un sobreesfuerzo pero desde el sindicato advierten "que el sistema no puede funcionar basado en esfuerzos de una plantilla fatigada".

RECLAMAN UNA FORMACIÓN BECADA Y UNA CORRECTA DOTACIÓN DE PLANTILLA.

En su opinión, la manera más efectiva para mitigar las demoras y congestión del espacio aéreo es una correcta dotación de plantilla de controladores aéreos, "más aún cuando la imagen de la principal actividad económica del país se ve perjudicada por el nivel de demoras de sus aeropuertos".

Según datos de USCA, España, segundo país más visitado del mundo, cuenta con los controladores que mayor jornada anual realizan y su media de edad, próxima a los 50 años, está entre las más altas de los países de nuestro entorno. Esta situación, agravada por 67 meses de incrementos ininterrumpidos de tráfico aéreo, se debe revertir.

Es por ello que el sindicato entiende que tanto la contratación como la formación becada de controladores aéreos debe ser tomada en cuenta como una prioridad por parte de las autoridades, "para poder proveer a los pasajeros de un servicio público sin retrasos y alejarlo de la tendencia de reducir continuamente la calidad del empleo y de los servicios públicos a través de privatizaciones".

Igualmente cree necesario que, "hasta que el número de controladores sea el adecuado", se tomen las medidas de regulación necesarias para garantizar la seguridad de las operaciones y equilibrar el flujo de llegadas y salidas, evitando demoras en vuelo o esperas en las proximidades de los aeropuertos.

Dentro del plan estratégico de ENAIRE, el 'Plan de vuelo 2020', se contempla que el número de controladores habilitados y plenamente operativos alcance los 253 efectivos y se recoge la previsión de solicitar en los próximos años la aprobación de plazas adicionales tanto de controladores como de técnicos de mantenimiento, operaciones, ingenieros y personal de apoyo. Para 2019, se planificó una oferta extraordinaria de 85 plazas.