Los ingresos del periodo cayeron más de un 50%
La aerolínea británica easyJet ha advertido este martes de que prevé una cierta disminución de la demanda en su primer trimestre fiscal tras los brotes de Covid-19, como la variante Ómicron, pero ha añadido que sigue estando bien situada para manejar la incertidumbre.
La compañía ha hecho estas declaraciones al anunciar sus cifras del año fiscal, con unas pérdidas netas de 858 millones de libras (1.010 millones de euros) después de haber registrado unos números rojos de 1.079 millones de libras (1.270 millones de euros) en el ejercicio previo.
Los ingresos correspondientes al periodo fueron de 1.458 millones de libras (1.715 millones de euros) frente a los 3.009 millones de libras (3.539 millones de euros) de 2020.
A pesar de la incertidumbre causada por la variante Ómicron y el debilitamiento de las cifras de reservas, easyJet espera que la capacidad vuelva a los niveles de 2019 el próximo verano. Mientras tanto, ha seguido ajustando su red para añadir bases en regiones de mayor tráfico.
"Aunque hay muchos vientos en contra, easyJet está haciendo un esfuerzo para ser sensible a la situación y ágil cuando las circunstancias lo permiten", señala Richard Hunter, analista jefe de la firma Interactive Investor.
"Se está concentrando en su red general y, en particular, en los hubs de mayor margen, al tiempo que aumenta sus productos auxiliares para incrementar los ingresos. Consciente también de los posibles retos que se avecinan, ha reestructurado su base de costes, lo que, en este periodo, se ha traducido en un recorte del 33% de los costes generales", detalla Hunter.
Pese a todos los progresos, desde Interactive Investor reconocen que las cifras son "incómodas" y subrayan la magnitud de los retos que easyJet tiene por delante. "Por ejemplo, aunque los ingresos se ajustaron a las expectativas, descendieron un 52% respecto a 2020 y un 77% respecto a los niveles anteriores a la pandemia. La brecha entre los ingresos por asiento y el coste por asiento también se está ampliando, y aunque la cifra de pérdidas antes de impuestos, de 1.000 millones de libras, es ligeramente mejor de lo esperado ante las restricciones de funcionar al 17% de la capacidad en el tercer trimestre y al 58% en el cuarto, la compañía se ha visto obligada a dirigir el negocio con una mano atada a la espalda", apuntan.