Dimite la consejera delegada de Imperial Brands, Alison Cooper
La compañía seguirá llevando a cabo su política de desinversión en activos
La compañía tabaquera Imperial Brands ha informado este jueves de que su consejera delegada, Alison Cooper, renunciará a su cargo en cuanto se le encuentre un sustituto.
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La compañía ha precisado que, mientras continúa la búsqueda de un sucesor, Cooper se centrará en impulsar el rendimiento del negocio, incluyendo el programa de desinversión de activos, del cual la compañía espera obtener ingresos de hasta 2.000 millones de libras (2.460 millones de dólares) para mayo de 2020.
A finales del pasado mes, Imperial Brands registró su mayor caída en una década en una sola jornada (más del 10%) tras anunciar que no había obtenido beneficios en el último año. La compañía achacó la situación a las restricciones que Estados Unidos quiere imponer en el negocio del vapeo tras detectarse diversos casos de enfermedad pulmonar, y al declive en el consumo de tabaco.
El analista Michael Hewson reconoce que "el timing de la operación es curioso teniendo en cuenta que la compañía y el sector ya tenía suficientes vientos en contra".
Hewson recuerda que solo la pasada semana las acciones de Imperial Brands cayeron a mínimos de hace nueve años tras anunciar un profit warning. Para este analista, "la industria del tabaco afronta ahora una crisis existencial a la que se suman problemas como la amenaza de que EEUU pueda prohibir los cigarrillos electrónicos en el mercado".
