Credit Suisse llevará acabo una reestructuración de su negocio en Suiza para adaptarse a las necesidades de sus clientes, cada vez más predispuestos a usar la banca móvil y digital, que incluirá la fusión entre su filial Neue Aargauer Bank AG (NAB) con la entidad matriz para evitar duplicidades, lo que supondrá el cierre de decenas de oficinas en el país y desembocará en un ajuste de plantilla, cuyo alcance exacto no ha sido precisado por la el banco.
El banco suizo ha destacado la creciente preferencia de sus clientes por el uso de los servicios digitales y telefónicos del banco para completar sus transacciones, una tendencia que se ha intensificado a raíz de la crisis del coronavirus, mientras que el tráfico de las sucursales ha ido disminuyendo durante años.
De este modo, Credit Suisse ha expresado su intención de fusionar el negocio de NAB con el de Credit Suisse y adaptar su red de sucursales suizas, con el objetivo de reducir su número a 109, frente a las 146 actuales. "Se espera que los cambios en la red de sucursales de Credit Suisse en Suiza, incluidas las oficinas en el cantón de Aargau, se implementen a finales de 2020", ha informado el banco.
NAB cuenta en la actualidad con 30 sucursales y 530 empleados en el cantón de Aargau, con unos 19.000 millones de francos suizos (17.961 millones de euros) en activos gestionados y un volumen de préstamos hipotecarios de unos 19.100 millones de francos suizos (17.785 millones de euros). Al término de la fusión, Credit Suisse espera contar con 12 oficinas en el cantón.
"Es inevitable una reducción de la plantilla de NAB y de la división de banca universal de Credit Suisse", ha anunciado el banco, señalando que la fusión prevista y, en particular, las medidas relativas a los empleados están sujetas a la conclusión del proceso de consulta con los representantes de los trabajadores.
En este sentido, Credit Suisse ha explicado que existe un plan social cuyo objetivo principal es encontrar empleo, ya sea dentro del banco o externamente, para el mayor número posible de empleados afectados, mientras que la entidad planea reinvertir gran parte de las sinergias previstas en su negocio suizo, lo que dará lugar a la creación de nuevos roles y contrataciones.
"Se espera que las medidas anunciadas hoy, incluida la fusión prevista de NAB con Credit Suisse, generen un ahorro de costes brutos de alrededor de 100 millones de francos suizos (más de 90 millones de euros) anuales a partir de 2022", ha indicado el banco, subrayando que este ajuste forma parte del plan de ahorro anual más amplio de la entidad, que contempla una reducción de costes en 400 millones de francos suizos (372 millones de euros) desde 2022.
El plan de reestructuración del negocio suizo supondrá unos costes extraordinarios de alrededor de 75 millones de francos suizos (70 millones de euros). En conjunto, el plan de ajuste de la entidad helvética tendrá un impacto adverso puntual de entre 300 y 400 millones de francos suizos (279 y 372 millones de euros).