Aunque el banco americano también destaca los "desafíos operativos a corto plazo"
Los analistas de Citi han reiterado su consejo de 'neutral' sobre Técnicas Reunidas, con una valoración de 9 euros por acción, después de que la compañía se viera obligada a solicitar un rescate financiero de 290 millones de euros al Gobierno español.
Según su valoración, "el riesgo-recompensa claramente parece más favorable dada la reciente caída del precio de las acciones", que se desplomaron tras la solicitud del rescate. Sin embargo, se mantienen neutrales a la espera de "más claridad sobre la progresión del margen de beneficio a corto plazo y los términos del rescate financiero".
En este sentido, consideran que, tras presentar unos "débiles resultados" en el segundo trimestre, Técnicas Reunidas todavía enfrenta "desafíos operativos a corto plazo" relacionados con el impacto de la pandemia y con las provisiones para su negocio, debido a los "resultados negativos asociados" al Covid-19.
Técnicas Reunidas se anotó unas pérdidas netas de 164 millones de euros en los seis primeros meses de este año, frente al beneficio de 14,1 millones de euros registrado en el mismo periodo de 2020.
Además, tuvo que acogerse al Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas de la SEPI, entidad pública de la que recibirá 290 millones de euros en préstamos.
"La pandemia ha sido más larga de lo que nadie esperaba hace un año y el impacto mucho más profundo. Los daños sufridos por Técnicas Reunidas se han generado por distintas vías. Por un lado, hemos tenido obstáculos en la gestión de nuestras operaciones que han hecho muy difícil y costoso avanzar en los proyectos en ejecución. Por otro lado, hemos tenido que reprogramar grandes proyectos que representan más del 50% de nuestra cartera, con la consiguiente inactividad temporal de los recursos preparados para abordarlos", explicó la compañía presidida por Juan Lladó.
Sobre los 290 millones solicitados, uno de 150 millones se articulará en forma de préstamo participativo para compensar el impacto de la pandemia sobre los fondos propios, y otro mediante un préstamo ordinario de 140 millones, destinado a compensar el alargamiento de los plazos de ejecución de sus proyectos en marcha, afectados también por la crisis sanitaria.
Los dos préstamos tendrían una duración de cuatro años, con la posibilidad de ser amortizados anticipadamente, y se espera que su desembolso se produzca en el cuarto trimestre del presente año.