La CIA acusa a Huawei de tener detrás al espionaje chino

Según el citado periódico, la tecnológica habría recibido financiación del Ejército Popular de Liberación, de la Comisión de Seguridad Nacional China y de la red de inteligencia estatal del país. Por eso, según los documentos de los servicios de inteligencia americanos a los que ha tenido acceso The Times, el contar con la infraestructura de esta compañía para el uso de redes 5G podría implicar riesgos de seguridad para el Reino Unido.

No es la primera ocasión en la que Estados Unidos acusa a la teleco de espionaje. La posibilidad de que Europa finalmente bloquee a Huawei en la implantación de su infraestructura podría aplazar la introducción de la nueva red 5G al menos dos años. Uno de los últimos campos de batalla de acusaciones entre EEUU y el gigante asiático fue, precisamente, en el último Mobile World Congress de 2019.

La bronca entre el gobierno estadounidense y la compañía china se remonta a comienzos de 2018 con las acusaciones del Ejecutivo americano de que la empresa habría realizado robo de secretos comerciales y espionaje. Se señaló en concreto a Meng Wanzhou, hija del fundador de Huawei, directora financiera. Canadá aprobó en marzo de este año la extradición de Wanzhou, que ya fue detenida en Vancouver en diciembre del año pasado.

El Departamento de Justicia de los Estados Unidos presentó en enero del presente año 23 cargos contra Huawei, a día de hoy el mayor fabricante mundial de equipos de telecomunicaciones. Huawei desde entonces viene rechazando todas las acusaciones estadounidenses y se ha declarado "decepcionada" por todas ellas.

PRESIÓN DE TRUMP EN EUROPA

Todas las maniobras estadounidenses se enmarcan en un plan de presión que viene ejerciendo el gobierno de Donald Trump para evitar que Huawei sea la responsable de desplegar la nueva red 5G (que multiplicará la velocidad de transmisión de datos) en los países europeos. Al respecto, un ingeniero sénior de la firma asiática declaró ante los medios y la agencia EFE esta semana que el hecho de que un producto "sea o no seguro" ha de basarse "en estándares y no en especulaciones".

"No entiendo que acusen sin pruebas técnicas"; vino a lamentar Zhou Yue, dando una respuesta de una inequívoca contundencia en comparación a las voces oficiales que desde la empresa asiática se venían escuchando. Frente al firme temor occidental de que Huawei pueda actuar como un títere de Pekín, Zhou defendió que el equipo de ciberseguridad es "independiente" de las líneas de producción de la compañía, en un reportaje de Fernando Labrador para EFE.

OTRAS MARCAS CHINAS, IMPLICADAS

Huawei no es la única empresa china que está sufriendo las sanciones estadounidenses. Otra competidora, ZTE, perdió 900 millones en 2018 por las sanciones del país americano. Las pérdidas netas atribuidas al conjunto de 2018 ascendieron, en el caso de esta marca, a 6.984 millones de yuanes, 923 millones de euros.

Se debe a que ZTE tuvo que cesar sus actividades globales en mayo del año pasado después de que Estados Unidos levantase un veto en el país a la compra de componentes de esta firma.