La facturación de la compañía correspondiente a 2015 ascendió a 859 millones de euros
Casa Tarradellas, fundada el 27 de julio de 1976 por Josep Terradellas en Gurb (Barcelona), celebra este año su 40 aniversario, con una facturación que ascendió en 859 millones de euros en 2015, una plantilla de cerca de 1.800 empleados y once centros de producción, según Europa Press.
En estas cuatro décadas, la capacidad productiva de la empresa se ha ampliado y cuenta en la actualidad con once centros de producción, entre los que destaca una planta de reciclaje para recuperar y reutilizar los recortes de material PET que se producen en las líneas de envasado y un molino propio en el que elabora la harina para sus pizzas.
Este último año, Casa Tarradellas ha invertido diez millones de euros en ampliar la planta harinera para doblar la producción; asimismo, ha continuado apostando por la innovación y mejora constante de su portofolio con el lanzamiento de nuevos productos al mercado como la pizza rústica de pollo.
COMIENZOS
Casa Tarradellas comenzó como un pequeño obrador dedicado a la elaboración de productos cárnicos que contaba con una pequeña fábrica, un restaurante y una tienda, y la empresa dio su primer salto al mercado con el lanzamiento del Espetec.
Posteriormente, en 1987, lanzó el primer paté envasado en cristal del mercado, posicionándose como una marca que apostaba por la innovación dentro del sector del gran consumo y con la vocación "por la transparencia y por mostrar los productos tal como son".
La apuesta de Casa Tarradellas por el I+D también se vio reflejada con el lanzamiento del jamón york loncheado y listo para consumir, siendo la primera empresa en apostar por esta línea de producto, siempre tratando de satisfacer las necesidades del consumidor.
Uno de los grandes hitos de la compañía tuvo lugar en 1997, con el lanzamiento de las pizzas Casa Tarradellas, las primeras pizzas refrigeradas del mercado, dado que hasta ese momento solo existían las pizzas congeladas. Además de las pizzas, la gama de refrigerados de Casa Tarradellas también cuenta con la gama de bases para preparar recetas de hojaldre, brisa, pizzas al gusto del consumidor y mixto (sándwiches rellenos).
CALIDAD Y SEGURIDAD ALIMENTARIA
Durante 40 años, la compañía ha mantenido el compromiso por garantizar la calidad y seguridad alimentaria de sus productos, y con este objetivo, en 2010 puso en marcha un centro de producción e investigación de harina, donde actualmente elabora la harina de sus pizzas e investiga la variedad más adecuada para cada una de sus recetas.
La compañía cuenta con la certificación según la Norma Internacional para los Alimentos IFS y la certificación según la Norma BRC para alimentación, así como el Certificado del Sistema de Gestión Ambiental según la norma ISO 14001 y la certificación según el sistema comunitario de gestión y auditoría ambiental EMAS, un sistema voluntario que valida los altos estándares medioambientales de la compañía.
Además, recientemente ha renovado la normativa internacional OSHAS 18001, que certifica y avala su sistema de implementación, mantenimiento y mejora de su sistema de Prevención de Riesgos Laborales.