La presidenta del banco explica que el dividendo total se elevará un 5%, mientras que el abono en efectivo un 9%
Banco Santander elevará el dividendo un 5% este año, hasta alcanzar los 22 céntimos por acción con cargo a los resultados de 2017, lo que supone una rentabilidad por dividendo del 3,8% sobre los 5,77 euros (+0,26%) en los que han cerrado los títulos este viernes. La entidad presidida por Ana Botín, además, mantendrá el esquema de pagos con tres abonos en efectivo y uno con el 'scrip dividend'.
El anuncio de la presidenta se produce en la junta general de accionistas del banco, que se celebra hoy en Santander, acaparando la atención de los inversores en España (con permiso de los sucesos internacionales entre Estados Unidos y Rusia por Siria). La subida es de un céntimo respecto a este año, cuando la retribución al accionista se ha situado en 21 céntimos, un 5% más que en 2015, cuando metió el tijeretazo desde los 60 céntimos del ejercicio anterior. En total, el banco destaca que incrementa su dividendo un 20% entre 2015 y 2017.
Habrá tres pagos en efectivo de 0,06 euros, cifra que se incrementará en total en un 9% respecto al abono en efectivo realizado con cargo a los resultados de 2016. El pago restante se realizará mediante el programa de dividendo flexible o 'scrip dividend', en el que el accionista puede elegir si cobrar en efectivo o con nuevas acciones.
Una modalidad que en la entidad conocen como 'Santander dividendo opción' y que la propia Botín tiene el objetivo de ir eliminando, en línea con el resto de cotizadas españolas, ya que la mejoría empresarial y la eliminación de la ventaja fiscal con la que se podía evitar tributar este dividendo, están desterrando una moda que se popularizó en la bolsa española en los peores momentos de la crisis.
La presidenta, según declaraciones que recoge Europa Press, ha calificado de "positiva" la política del banco que incluye este aumento del dividendo, que se ha sometido a la aprobación por parte de la junta de accionistas, así como el reparto con cargo a los resultados de 2016 de 0,21 euros, de los que tres ya han sido abonados y queda un pago de 0,055 euros en mayo. Santander "hoy es el banco mejor valorado de Europa a razón de 1,3 veces el valor tangible por acción", asegura Ana Botín. La presidenta ha destacado además que este año la entidad va a "seguir invirtiendo en tecnología, destinando a este fin 1.900 millones de euros al año".
REELECCIÓN DE ANA BOTÍN
Como estaba previsto, la junta de accionistas de Santander ha aprobado este viernes la reelección de Ana Botín, del consejero delegado de la entidad, José Antonio Álvarez, y del vicepresidente Rodrigo Echenique como consejeros ejecutivos, como recoge Europa Press.
Los accionistas también han votado a favor de la reelección como consejeras de la expresidenta de Sareb Belén Romana y de Esther Giménez-Salinas, así como la ratificación de Homaira Akbari, consejera delegada de la consultora Aknowledge Partners, que fue nombrada consejera independiente el pasado mes de septiembre.
Durante su intervención en la junta, Botín ha puesto en valor la incorporación de Akbari al consejo, que "ha reforzado notablemente los conocimientos y experiencia" del mismo tanto en el ámbito de la transformación digital como en el internacional.
La asamblea de accionistas ha dado su visto bueno también, como es habitual, a las cuentas anuales, así como la gestión y la aplicación del resultado, y también ha votado a favor de autorizar al consejo de administración para que pueda aumentar el capital en una cuantía nominal máxima de 3.645,58 millones de euros, en una o varias veces y en cualquier momento en el plazo de tres años.
Por otra parte, los accionistas han aprobado delegar en el consejo de administración la facultad para que, en el plazo de un año contado desde este viernes, pueda señalar la fecha y fijar las condiciones, en todo lo no previsto por la propia junta, de un aumento de capital con emisión de nuevas acciones que, por un importe de 500 millones de euros, se acuerda por la misma junta general de accionistas.
Además, como informa Europa Press, los accionistas han aprobado delegar en el consejo la facultad de emitir valores de renta fija, participaciones preferentes o instrumentos de deuda de análoga naturaleza, incluyendo cédulas, pagarés o warrants, no convertibles.
Los accionistas han aprobado también este viernes la política de remuneraciones de los consejeros para los ejercicios 2017, 2018 y 2019, así como la fijación del importe máximo de la retribución anual a satisfacer a los miembros del consejo y la ratio máxima entre los componentes fijos y variables de la remuneración total de los consejeros ejecutivos y otros empleados. Además, han aprobado la aplicación de planes retributivos que impliquen la entrega de acciones o de opciones sobre títulos de la compañía.
En concreto, han aprobado que se establezca una ratio máxima del 200% entre los componentes variables y fijos de la remuneración total de los consejeros ejecutivos y de determinados empleados pertenecientes a categorías cuyas actividades profesionales incidan de manera significativa en el perfil de riesgo del grupo.
Los beneficiarios de este acuerdo son los consejeros ejecutivos de Santander, los altos directivos, los empleados que asumen riesgos o que ejercen funciones de control, así como otros trabajadores que perciben una remuneración global que los incluye en el mismo baremo de remuneración que el de estas categorías.
También se ha acordado la aplicación del segundo ciclo del Plan de Retribución Variable Diferida y Vinculada a Objetivos Plurianuales, un sistema de retribución que incluye la entrega de acciones del banco o de derechos sobre ellas y que prevé incentivos para los próximos años a los consejeros ejecutivos de banco, directores generales, country heads y otros directivos relevantes de los principales países en los que opera el grupo.
Este plan también implica la entrega (inmediata o diferida) de acciones del banco en el marco de la aplicación de la política de 'buy-outs' del grupo aprobada por el consejo de administración y la aplicación de un plan de ahorro voluntario destinado a los empleados de Santander UK, de sociedades de su subgrupo y de las restantes sociedades de grupo domiciliadas en el Reino Unido en las que el Grupo tenga una participación directa o indirecta de al menos el 90% del capital.