El banco ha revelado los detalles de la carta que mandó ayer al Consejo de Sabadell
BBVA ha revelado este miércoles la carta enviada ayer a Banco Sabadell con los pormenores de su oferta de fusión. El banco ofrece 1 acción de nueva emisión de BBVA por cada 4,83 acciones de Banco Sabadell, lo que supone una prima del 30% sobre el cierre del 29 de abril (antes de conocerse la noticia); del 42% sobre las cotizaciones medias ponderadas del último mes; o del 50% sobre las cotizaciones medias ponderadas de los últimos tres meses. Tras la fusión, los accionistas de Sabadell tendrían un 16,0% de participación de la entidad resultante.
BBVA ha dicho que la fusión propuesta supondría una clara generación de valor para sus accionistas. Según sus estimaciones, esta transacción es positiva en beneficio por acción (BPA) desde el primer año tras la fusión, alcanzando una mejora de aproximadamente el 3,5% una vez se produzcan los ahorros asociados a la fusión, que se estiman en aproximadamente 850 millones de euros antes de impuestos. Adicionalmente, el valor en libros tangible por acción aumentaría en torno al 1% en la fecha de la fusión. La operación ofrecería un "elevado retorno de la inversión" (ROIC3 cercano al 20% para los accionistas de BBVA). Todo ello, con un impacto en el CET1 de aproximadamente -30 puntos básicos en el momento de la fusión, al tiempo BBVA mantiene la política de remuneración a su accionista.
BBVA atendería el canje de las acciones de Banco Sabadell mediante emisión de nuevas acciones ordinarias cuya suscripción estará reservada a los titulares de acciones de Banco Sabadell y sobre las que se solicitaría su admisión a cotización en el Mercado Continuo español y en los restantes mercados en los que cotizan sus acciones.
La fusión quedaría sujeta a la obtención de las correspondientes autorizaciones o declaraciones de no oposición pertinentes de los supervisores competentes (en particular, la autorización de la persona titular del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa) y de las autoridades de defensa de la competencia con jurisdicción (en particular, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia). BBVA considera que se podrán obtener las referidas autorizaciones y declaraciones de no oposición "de forma satisfactoria y en tiempo y forma".
En la carta dirigida al Consejo de Administración de Sabadell, BBVA subraya que la combinación de ambas entidades daría lugar al proyecto industrial más atractivo de la banca europea. En este sentido, destaca los beneficios de la fusión para ambas entidades, sus accionistas, empleados, clientes y las sociedades en las que operan.
Se propondría la incorporación, como consejeros no ejecutivos, al Consejo de BBVA, de 3 miembros del actual Consejo de Sabadell
Hace alusión a que la nueva entidad se convertiría en una de las mayores y más sólidas entidades financieras en Europa, con activos totales por encima del billón de euros y más de 100 millones de clientes a nivel mundial, con la ambición de ser el mayor banco por capitalización bursátil de la zona euro.
"La mayor escala permitiría afrontar en mejores condiciones los retos estructurales del sector y llegar a un mayor número de clientes, abordando de forma eficiente las inversiones en transformación digital. La entidad combinada sería más sólida y eficiente, y un referente en el mercado por volumen de activos, créditos y depósitos", dice BBVA en su carta.
BBVA destaca el encaje estratégico y complementariedad de ambas compañías, siendo Sabadell el referente en España en el segmento de empresas y, al igual que BBVA, una entidad líder en digitalización y sostenibilidad. Además, la presencia de Banco Sabadell en Reino Unido se sumaría a la escala global de BBVA y su liderazgo en México, Turquía y América del Sur, afirma.
Por esto, considera que la entidad fusionada sería el mejor socio financiero de familias y empresas, con una mejor oferta de productos y una mayor capacidad de acompañar a las empresas en su expansión internacional.
La creación de una entidad más fuerte y más rentable también se traduciría en una mayor contribución vía impuestos y en una remuneración creciente y atractiva para los accionistas, ha dicho BBVA.
El tipo de operación es una fusión por absorción de Sabadell por BBVA. La denominación social y la marca serían las de BBVA, aunque se mantendría la utilización de la marca Sabadell, de manera conjunta con la marca BBVA, en aquellas regiones y negocios en las que pueda tener un interés comercial relevante.
En la integración de las plantillas se respetarían los principios de competencia profesional y mérito, sin la adopción de medidas traumáticas
BBVA ha indicado que, dada la relevancia de Cataluña tanto para Sabadell como para BBVA, la nueva entidad incrementaría el apoyo al tejido empresarial, cultural, científico y social a través de la actividad bancaria y de sus respectivas fundaciones. Además, el nuevo banco tendría una doble sede operativa en España, una de ellas en el centro corporativo de Banco Sabadell en Sant Cugat.
BBVA ha propuesto la creación de un comité de integración con representantes de ambas organizaciones con el fin de diseñar, con pleno respeto de la normativa de Derecho de la competencia, el mejor proceso de integración, "buscando potenciar al máximo el talento existente en ambas entidades".
En este sentido, ha dicho que, en la integración de las plantillas se respetarían en todo caso los principios de competencia profesional y mérito, sin la adopción de medidas traumáticas o que afecten singularmente a los empleados con origen en una de las dos entidades.
El equipo directivo de la entidad resultante se conformaría con ejecutivos procedentes de ambos bancos, atendiendo a principios de competencia profesional y mérito, procurando guardar la proporcionalidad en función del peso relativo de los negocios, ha indicado BBVA.
Se crearía asimismo un consejo asesor para España que contaría con relevancia institucional y comercial y al que se incorporarían actuales consejeros y ejecutivos de ambas entidades.
Además, BBVA ha dicho que se propondría la incorporación, como consejeros no ejecutivos, al Consejo de Administración de BBVA (al tiempo de materializarse la fusión), de 3 miembros del actual Consejo de Administración de Banco Sabadell, elegidos de común acuerdo entre ambas partes. Uno de estos consejeros sería propuesto como uno de los vicepresidentes del Consejo de Administración.