No espera aumento de provisiones por este tema, pues el banco ha actuado "conforme a la ley"
Bankia está sufriendo una ralentización en la firma de hipotecas después de que el Tribunal Supremo sentenciase hace diez días que los bancos deben hacerse cargo del coste del Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados (IAJD). Según ha explicado José Sevilla, el consejero delegado de la entidad, algunos clientes están esperando al próximo 5 de noviembre, cuando el alto tribunal se pronunciará definitivamente sobre este tema, para firmar el préstamo.
“Estos días estamos viendo un cierto retraso por parte de algunos clientes en la toma de decisiones”, ha señalado durante la presentación de los resultados trimestrales de Bankia, añadiendo que “en un entorno de inseguridad, el cliente que puede esperar unos días lo está haciendo”.
En todo caso, ha apuntado que no se está apreciando “afectación” en los clientes que se interesan por contratar una hipoteca, pues “eso está funcionando igual que antes”. “Lo que estamos viendo es una cierta ralentización en la firma de hipotecas”, ha dicho Sevilla.
Esta afirmación contrasta con otras emitidas por entidades competidoras, como Bankinter o CaixaBank, cuyos consejeros delegados han explicado estos días durante sus respectivas presentaciones de resultados que están experimentando “normalidad” en la firma de hipotecas.
Sevilla no espera que la entidad vaya a tener que realizar nuevas provisiones si el Supremo finalmente mantiene su decisión de que el banco asuma el coste del impuesto en la concesión de hipotecas el próximo 5 de noviembre. En su opinión, el banco ha actuado "conforme a la ley", por lo que la sentencia no debería establecer retroactividad.
“Lógicamente no tendríamos que hacer provisiones, porque lo que hacíamos es cumplir con esa manera de hacer. No habría mayor cuestionamiento”, ha señalado el segundo ejecutivo de Bankia.
NO ES EL MEJOR "TIMING" PARA PRIVATIZAR
Sevilla ha reconocido que el momento actual no representa "el mejor timing" para llevar a cabo la privatización completa de Bankia, que cotiza en bolsa entorno a los 2,7 euros por acción, muy lejos de los 4,06 euros por título a los que desinvirtió el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob) un 7% de la entidad el pasado diciembre.
No obstante, ha explicado que la tendencia a la baja de la acción de Bankia es similar a la de sus competidores en España y los bancos europeos, pues es "un año difícil para las acciones bancarias". En su opinión, "hay que esperar a medio plazo" para ver una subida del precio de los títulos del banco, según vaya presentando buenos resultados y cumplimiento de su plan estratégico 2018-2020.
El segundo ejecutivo de la entidad no ha querido pronunciarse sobre el plazo con el que, en teoría, cuenta el Frob para la desinversión, que vence a finales de 2019 y que podría alargarse si fuera necesario. "Si sería bueno o no cambiar el plazo, eso es el Ministerio [de Economía y Empresa] el que se tiene que pronunciar y lo tiene que valorar", ha apuntado.