En Berenberg creen que la actual debilidad del precio de la acción ofrece un excelente punto de entrada
Desde que el presidente de EEUU, Donald Trump, anunciara, a principios de febrero, nuevos aranceles de importación a los bienes de México, Canadá y China, las acciones de Fluidra han sufrido un duro revés, acumulando caídas de doble dígito. ¿Son los aranceles una amenaza para las perspectivas de ganancias de la compañía?
En Berenberg consideran que las preocupaciones son "exageradas" y confían en que los aranceles "no afecten materialmente a las perspectivas de ganancias de Fluidra".
Como explican en su último informe sobre la compañía, los aranceles para las importaciones de México y China "se traducirían en alrededor de 50 millones de euros de costes anuales adicionales para Fluidra, si se implementaran por completo, en ausencia de acciones de mitigación. Esto se compara con los 1.000 millones de euros de ingresos en América del Norte en 2025".
Destacan que el plan de acción de la empresa para compensar los aranceles estadounidenses consta de tres pilares, que comprenden, en primer lugar, un recargo de precio; en segundo lugar, ajustes a la base de proveedores; y, en tercer lugar, ganancias de eficiencia.
"Suponemos que el recargo por precio será el mayor de los tres componentes y observamos que el mayor competidor estadounidense de la empresa ya ha anunciado un aumento de precio", afirman.
En 2024, el beneficio neto de Fluidra alcanzó los 138 millones de euros, lo que representa un incremento del 21% respecto al año anterior, mientras que las ventas fueron de 2.102 millones de euros, un 3% más.
Además, Fluidra anunció sus previsiones para 2025, manteniendo unas perspectivas "positivas" y estimando un crecimiento orgánico de las ventas y una expansión del margen. Así, espera para 2025 unas ventas de entre 2.140 y 2.250 millones de euros, un EBITDA ajustado de entre 500 y 540 millones de euros y un beneficio neto ajustado por acción de entre 1,33 y 1,48 euros.
En este sentido, desde Berenberg comentan que los resultados de 2024 fueron "sólidos" y que la orientación para 2025 es "tranquilizadora". También califica el plan de acción como "creíble para mitigar por completo los costes adicionales derivados de los aranceles estadounidenses".
"La dirección transmitió un mensaje tranquilizador en el sentido de que podría mitigar por completo el impacto de las tarifas a nivel de EBITDA. El mensaje sobre otros temas también fue positivo, ya que la dirección destacó ganancias consistentes de participación de mercado en los últimos años, la buena ejecución de su programa de simplificación y que su algoritmo de crecimiento general que implica una tasa de crecimiento orgánico normalizada de alrededor del 5% sigue intacto, al tiempo que reconoció que es probable que la actividad de nueva construcción siga siendo moderada este año", indican.
Ven que las previsiones del grupo "son razonablemente conservadoras, especialmente teniendo en cuenta el fuerte impulso en el cuarto trimestre de 2024".
En su caso, prevén un crecimiento de los ingresos del 5% en 2025, "ayudado por los efectos positivos del tipo de cambio y las fusiones y adquisiciones, pero con otro pequeño descenso (alrededor del 2%) en los volúmenes de nuevas construcciones". Y esperan más ganancias del margen bruto y una mejora del margen EBITDA de unos 100 puntos básicos, hasta el 23,7%, "debido a la ejecución continua del programa de simplificación", lo que "conduce a un atractivo crecimiento del BPA en efectivo del 15% interanual".
Los analistas otorgan a Fluidra una recomendación de 'compra', con un precio objetivo de 28 euros por acción. "En general, nos gusta la empresa como un compuesto de alta calidad con una sólida posición de liderazgo en un mercado muy atractivo", aseguran.
Si bien creen que su valoración "solía ser exigente en ocasiones", ven que "la actual debilidad del precio de las acciones ofrece un excelente punto de entrada". Además, "una recuperación de la demanda de nuevas piscinas sigue brindando una amplia opcionalidad alcista a medio plazo", añaden.