Los resultados de las grandes tecnológicas marcarán la agenda de los inversores
Los resultados que Alphabet (martes), Facebook y Microsoft (miércoles), Amazon y Apple (jueves) publicarán en los próximos días examinarán el histórico rebote de Wall Street desde los mínimos de marzo. Hasta la fecha, las grandes tecnológicas se han comportado mucho mejor que el conjunto del mercado, ya que los inversores anticipan que sus modelos de negocio seguirán triunfando en la era del Covid-19.
Buena prueba de ello es que el índice Nasdaq tan sólo cae un 3% en lo que va de año, mientras el Dow Jones baja un 15%. Microsoft y Facebook publicarán sus cifras el miércoles, tras el cierre del mercado. El fabricante de software fundado por Bill Gates y ahora dirigido por su CEO, Satya Nadella, acumula una subida del 11% en lo que va de año, aunque no ha podido superar su máximo histórico de febrero, en 190,70 dólares, antes de lanzar un profit warning por la crisis.
En cualquier caso, su comportamiento bursátil ha sido mucho mejor que la media del mercado, debido a que su negocio de servicios en la nube y la demanda de sus productos por el teletrabajo tienen buenas perspectivas. La división Azure, especializada en cloud computing, es uno de los jugadores más importantes del mercado y sus cifras serán seguidas muy de cerca por los analistas, así como cualquier previsión de cara a próximos trimestres.
Facebook ha tenido un comportamiento más discreto en este periodo. La red social baja casi un 8% en lo que va de año, ya que su modelo de negocio, basado en la publicidad en sus diferentes plataformas, no es tan inmune a la crisis actual. La compañía fundada por Mark Zuckerberg marcó un máximo histórico en 224,20 dólares en enero, pero ahora cotiza por debajo de 190 dólares.
Los expertos de la firma Needham han destacado que entre el 30% y el 45% de sus ingresos globales por publicidad están "en riesgo" por el COVID-19. Por tanto, los resultados y las previsiones para los próximos meses serán fundamentales para comprobar la fortaleza de su negocio. Varios de sus principales mercados, como EEUU, España, Reino Unido, Italia, Francia y Alemania se han visto muy golpeados por la pandemia.
De un modo similar, las acciones de Alphabet, matriz de Google que publica el martes, bajan un 5% en lo que va de año. El valor no ha podido superar el máximo histórico que marcó en 1.530,74 dólares en febrero, debido a que su principal fuente de ingresos y beneficios procede de los ingresos por publicidad en su célebre buscador.
Además, el hecho de que muchos anunciantes en Google sean pequeñas y medianas empresas hace aún más complicado para la compañía captar ingresos con el actual panorama económico. Los analistas de RBC han anticipado que el mercado online de publicidad registrará un desplome del 30%, por lo que cualquier estimación o confirmación sobre este punto será importante para el mercado.
El jueves, será el turno de Apple y Facebook. El fabricante del iPhone cae un 4% en 2020. Tras marcar un récord en 327,87 dólares a finales de enero, sus acciones cotizan en 282 dólares. La semana pasada, lanzó su iPhone de bajo coste, el SE 2020, por 489 euros, en un intento por capear la crisis y dirigirse a consumidores con menos poder adquisitivo.
Apple no es inmune a la crisis, ya que se ha visto obligada a cerrar sus tiendas en todo el mundo, lo cual indudablemente afectará a sus resultados. La compañía ya tuvo que lanzar un profit warning en febrero y los inversores estarán muy pendientes de sus previsiones para los próximos meses.
Por último, Amazon ha sido hasta el momento el claro ganador de esta crisis. Sus títulos se revalorizan un 30% en lo que va de año y marcaron la semana pasada un máximo histórico en 2.461 dólares, lo que ha elevado su capitalización hasta 2 billones de dólares.
Su modelo de negocio, basado en el comercio electrónico y en el cloud computing, le ha hecho inmune a la crisis e incluso ha aumentado las previsiones ya de por sí positivas para su crecimiento. Así las cosas, el único peligro que afronta Amazon, al igual que Netflix hace unos días, es que los inversores han descontado ya todo lo bueno y pueden aprovechar la publicación de resultados para recoger beneficios y buscar un punto de entrada más atractivo.