Estas pérdidas contrastan con las ganancias de 186,1 millones de dólares del año anterior
La farmacéutica irlandesa Allergan, conocida por ser la propietaria de Botox, ha presentado hoy unos pérdidas atribuidas a los accionistas de 2.634 millones de dólares (2.420 millones de euros) en el primer trimestre de 2017, frente a las ganancias de 186,1 millones de dólares (171 millones de euros) que obtuvo en el mismo periodo del ejercicio anterior.
La propia compañía atribuye estas pérdidas a la inversión en investigación y desarrollo, y a las amortizaciones anticipadas de activos. Asimismo, la farmacéutica incrementó sus ingresos netos durante los primeros tres meses del año un 5,08%, hasta los 3.572 millones de dólares (3.281 millones de euros).
El presidente y consejero delegado de Allergan, Brent Saunders, indicó que este año es "crucial" para la compañía y aseguró que este primer trimestre se ha ejecutado "correctamente".
Además, hizo especial alusión a algunas de sus marcas clave como Botox o Juvéderm que, "continúan presentando crecimientos significativos año a año".