El empresario se ha inventado negocios con Tom Cruisse, Brad Pitt, Madonna o Donald Trump
El impostor Alessandro Proto ha vuelto a escena. Como si estuviese en la piel de Leonardo Di Caprio en ‘Atrápame si puedes’, ha ideado una nueva personalidad para intentar enriquecerse. En su caso, no se ha hecho pasar por piloto, médico ni abogado; sino que se ha inventado una relación laboral con el multimillonario estadounidense Warren Buffett. Y no es la primera vez que lo hace.
El martes por la noche se anunciaba que Berkshire Hathaway, la compañía de Buffet, tenía intención de comprar la mítica torre Agbar de Barcelona por 150 millones de euros. Lo iba a hacer de la mano de Proto Group, la empresa de Proto.
Esta noticia, de la que se hicieron eco la mayoría de medios españoles, resultó ser una nueva farsa del empresario italiano, en uno de sus continuos intentos por relacionarse con famosos para relanzar su negocio de asesoría inmobiliaria. Finalmente, la información fue desmentida por Merlin Properties, actual propietaria de la torre.
ALESSANDRO PROTO INVENTÓ NEGOCIOS CON FAMOSOS DE TODO EL MUNDO
La historia de Proto está plagada de bulos. Todo comenzó con George Clooney. En 2009, el actor estadounidense acudió a la agencia inmobiliaria de Proto para vender una mansión que tenía en el Lago de Como (Italia). Buscaba discreción, pero encontró todo lo contrario. Nada más cerrar la puerta, el empresario contó la primicia a un diario italiano, que publicó la información. Así, de la noche a la mañana, consiguió publicidad sin desembolsar ni un solo euro.
Desde entonces, no ha parado de inventar negocios con grandes estrellas como Tom Cruisse, Brad Pitt, Angelina Jolie, Madonna o Donald Trump; aunque uno de sus ‘socios’ favoritos es Warren Buffet. La compra de la torre Agbar no ha sido su primer negocio inventado con el inversor estadounidense, ya que, supuestamente, le asesoró en 2015 para adquirir una isla griega. El propio Buffett tuvo que salir a desmentir esta noticia, aludiendo que no conocía de nada a Proto.
El mundo del deporte no ha escapado de las garras del asesor. Cristiano Ronaldo tuvo que desmentir a través de su agente la compra de un hotel en Mónaco por 140 millones de dólares, además de una favela en Brasil y un apartamento en la Trump Tower de Nueva York. El entorno del jugador portugués le llegó a amenazar con una denuncia. Leo Messi también ha desmentido a Proto, al negar haberle comprado el ferrari más caro del mundo, valorado en 32 millones de euros.
Las tretas de Proto intercalaron los negocios inmobiliarios con el mundo financiero, lo que le llevó a pasar dos meses en la cárcel en 2013 (fue condenado a 3 años y 10 meses), por manipulación del mercado financiero. Consiguió salir de prisión pagando 5 millones de euros, pero se mantuvo en arresto domiciliario. Tras este aviso, lejos de abandonar las mentiras, decidió inventar una nueva: el director Martin Scorsese iba a grabar una película sobre su vida.
Finalmente, esta película no se llegó a rodar, aunque hay quien afirma que en Proto si se ha inspirado otro famoso largometraje: ‘Cincuenta sombras de Grey’. La escritora E.L. James viajó a Italia en 2009 y conoció al empresario italiano, con quien se especuló que tenía una relación sentimental. No se ha confirmado que Alessandro Proto inspirase el personaje de Christian Grey, aunque sí que se ha empeñado en emular el célebre cuento de Pinocho durante toda su vida. De hecho, él mismo se califica como un impostor en su libro ‘Yo soy un impostor. Historia de un hombre que se la coló a todos’.