El Covid está cambiando el modelo de vivienda
La pandemia del Covid-19 está cambiando el modelo de vivienda. Los arquitectos ya han empezado a idear nuevos proyectos urbanísticos que van a ser muy diferentes a los que conocemos actualmente. Entre las innovadoras propuestas destacan aquellas enfocadas a reducir contagios, como ascensores que funcionan con la voz o el acceso con 'contacless' a zonas comunes.
El confinamiento ha generado la necesidad social de estar en continuo contacto con la naturaleza y el aire libre. "Se ha creado una gran oportunidad de renaturalizar la ciudad", destacó Cristian Vivas, de Vivas Arquitectos, en un encuentro telemático organizado por Ágora. Para trasladar el campo a la urbe, una de las ideas que propuso fue utilizar las azoteas para instalar pequeños jardines.
Un huerto en la cubierta es lo que sugiere Helena Salvadó, de Batlle i Roig Arquitectura. Su intención es conectar la sostenibilidad con el sentimiento de comunidad que se ha forjado cada tarde a la hora del aplauso a los sanitarios. "Tenemos la oportunidad de diseñar nuestra comunidad con espacios de relación con los vecinos, en los que podemos disfrutar de espacios que en nuestra casa no tendríamos", como gimnasios o salas de juego. Este modelo es mucho más común en Europa central, donde ya se ha demostrado que funciona.
Las ciudades se dirigen hacia la movilidad ecológica y la vivienda debe adaptarse al entorno que le rodea. Para conseguirlo, entre las zonas comunes puede habilitarse un espacio para guardar bicicletas o instalar puntos de carga para vehículos eléctricos. Eso sí, ahora mismo, preocupa la seguridad sanitaria y los edificios han de incorporar nuevos sistemas de acceso a estas zonas comunes que limiten al máximo el contacto con el pomo de una puerta.
Durante la pandemia se han disparado las búsquedas de pisos con balcón, un espacio que ha adquirido vital importancia con el confinamiento. Los arquitectos coinciden en que, a partir de ahora, los nuevos edificios han de utilizar la terraza como si fuese una habitación más. Será la única estancia especializada porque nos dirigimos hacia pisos desjerarquizados en los que el usuario es quien decide cómo orientar cada sala.
Sin lugar a dudas, el Covid también ha evidenciado la necesidad de una buena ventilación. "Uno de los objetivos clásicos del urbanismo siempre ha sido mantener la correcta ventilación, pero ahora es algo que hay que tener muy en cuenta en las próximas construcciones", remarcó Salvadó. "Antes ya sabíamos que era importante, pero ahora es imprescindible", añadía Vivas.
La directora de Proyectos Inmobiliarios en SDIN Residencial, Núria Sió, puso el punto de templanza al advertir de que el parque inmobiliario español no es muy flexible. Reconoció que nos encontramos ante una gran oportunidad para cambiar el modelo de vivienda, pero mandó un aviso claro: "Hay poco espacio para la creación una vez cumplida toda la normativa".
Visitar ahora mismo una residencia de estudiantes es desolador. Con la suspensión de las clases presenciales, que parece va a durar hasta final del curso, están prácticamente vacías. Por eso, estos espacios se están preparando ahora para que los estudiantes puedan pasar en la residencia un hipotético nuevo confinamiento si llega un rebrote del coronavirus en otoño.
El consejero delegado de Urbania, Jeffrey Sujar, explica a 'Bolsamanía' que existen muchas zonas comunes que deberán ser desinfectadas constantemente. Para evitar grandes aglomeraciones desecha la idea de contar con un gran comedor y prefiere cocinas compartidas que se utilicen por turnos. Incluso, en algunas construcciones se ha incorporado la cocina dentro de la propia habitación.
Sujar reconoce que la ocupación se mantendrá baja hasta que no se encuentre una vacuna que devuelva la normalidad. Se resigna a vivir un curso muy complicado para las residencias, porque "va a haber algo menos estudiantes, sobre todo en el primer trimestre, que van a venir muchos menos extranjeros".