Abengoa: admitida a trámite la querella por uso de información privilegiada y administración desleal

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La juez ha dado 24 horas a Benjumea y Ortega para que depositen una fianza civil de 16 millones de euros

La juez Carmen Lamela no sólo ha admitido a trámite la querella, sino que también ha dado 24 horas a Benjumea y Ortega para que depositen una fianza civil de 16 millones de euros, con la que se quiere garantizar la devolución de los 11,5 millones de euros y 4,5 millones de euros que cobraron respectivamente en concepto de indemnización pese a la situación de insolvencia de la empresa. Tendrán ese plazo antes de que la magistrada proceda al embargo de sus bienes, aunque según informa El Mundo al ser viernes el plazo no empezará a contar hasta la próxima semana.

La titular del Juzgado Central de Instrucción número 3 ha admitido, con el informe favorable de la Fiscalía, la querella que atribuye delitos de administración desleal a Benjumea y Sánchez Ortega y considera a este último culpable de otro delito de uso de información privilegiada.

La magistrada, informa Europa Press, ha requerido información a la compañía andaluza sobre los pagos de 11,48 millones efectuados a Benjumea y de 4,48 millones a Sánchez Ortega. Además, ha pedido a la CNMV que le envíe documentación sobre las operaciones de compraventa de acciones de la empresa desde el 1 de julio de 2015, y a la auditora Deloitte una copia de su último informe sobre las cuentas y resultados de la firma de energías renovables.

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BALÓN DE OXÍGENO

Banco Santander, CaixaBank, Bankia, Banco Sabadell y Banco Popular, HSBC y Calyon le han dado un préstamo de 113 millones

La admisión a trámite se produce el mismo día en que se ha conocido la noticia de que Abengoa recibirá un préstamo de 113 millones de euros para poder seguir operando hasta el 23 de marzo, justo antes de que termine el plazo para intentar escapar de la declaración definitiva en concurso de acreedores.

Se trata de un importante balón de oxígeno para la andaluza que le ha dado el grupo formado por los principales bancos acreedores, denominado G7 y compuesto por Banco Santander, CaixaBank, Bankia, Banco Sabadell y Banco Popular, HSBC y Calyon. Estas entidades han exigido como garantía el cumplimiento de un exigente plan de reestructuración y la participación de Abengoa en Abengoa Yield, su filial que cotiza en Estados Unidos.

PLAN DE VIABILIDAD

Y mientras tanto se empiezan a 'ordenar' los detalles del plan que ha ideado Abengoa para poder salir adelante después de que los bancos le hayan prestado el dinero necesario para poder subsistir durante los próximos meses.

Los detalles del mismo los publica este viernes Expansión y pasan por llevar a cabo un agresivo y acelerado plan de desinversiones de entre 2.500 y 3.000 millones; un recorte de costes de casi el 40%, que podría suponer la reducción de hasta el 15% de la plantilla en España, y por la negociación de una quita de la deuda con los bancos más o menos significativa, una capitalización de la misma o una combinación de ambas medidas.

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EL FONDO DE LA QUERELLA

Dos propietarios de bonos de Abengoa se querellaron contra la antigua cúpula de la compañía, que solicitó el preconcurso de acreedores el pasado 26 de noviembre, por buscar su "propio beneficio y lucro personal" al concederse indemnizaciones millonarias en lugar de "salvar a sus miles de inversores".

Los bonistas señalaron que Benjumea y Sánchez Ortega eran "conocedores de la auténtica realidad económico-financiera" de la empresa

Los bonistas señalaron que Benjumea y Sánchez Ortega eran "conocedores de la auténtica realidad económico-financiera" de la empresa y que buscaron su enriquecimiento "en vez de utilizar dicha información para salvar a miles de inversores que se verán atrapados en la situación concursal de la entidad y, de paso, a todos los contribuyentes españoles que deberán acudir a su rescate".

Los querellantes denunciaron que Benjumea se llevó una "exorbitante" indemnización por importe de 11.480.000 euros, poco antes de que la compañía solicitara en un juzgado mercantil de Sevilla el preconcurso oficial de acreedores. Sánchez Ortega, que dejó la empresa en mayo pasado, percibió una "contraprestación post-contractual" de 4.480.000 euros, a lo que habría que sumar 3.300.000 euros en concepto de "bonus variable" que percibirá "a cuenta de 2015 hasta su salida". Al cabo de unos días, según la querella, fichó por el fondo de inversión Blackrock y, un mes después, la gestora tomó "fuertes posiciones bajistas" en relación con los valores de Abengoa.

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