El partido de Rivera dice que apoyarán a Collboni
El líder de la plataforma BCN Canvi-Cs, Manuel Valls, ha ofrecido sus concejales a Ada Colau que, con el apoyo del PSC, podría hacerse con la vara de alcaldesa. El exministro francés, sin embargo, no contaría con el beneplácito de Ciudadanos, con quien se presentó en coalición a las elecciones del 26 de mayo.
El acuerdo entre Valls, que siempre ha sido un espíritu libre, y el partido parecía atado tras un encuentro con la actual portavoz nacional de los naranjas, Inés Arrimadas. El objetivo es evitar a toda costa que haya un gobierno independentista en la capital catalana, por lo que Valls habría hecho suyas las palabras de Arrimadas: "A veces hay que elegir entre la opción menos mala de todas".
Ciudadanos se ha apresurado a enfriar el ofrecimiento. En un comunicado, el partido liderado por Albert Rivera admite que el resultado electoral no les permite gobernar la ciudad y, por tanto, estarán "en la oposición".
Pero "si hubiera que impedir que haya un alcalde independentista o populista" en la capital catalana, los concejales de Ciudadanos negociarían con un candidato que no sea ni independentista ni populista", indica la formación, que expresa así su rechazo a que tanto Maragall como Colau asuman la Alcaldía.
"Ciudadanos está dispuesto a negociar con condiciones con el señor Collboni para que la ciudad de Barcelona sea una ciudad abierta y constitucionalista", añade, proponiendo de esta manera que el alcalde sea Collboni.
Fuentes conocedoras comentan a Bolsamanía que las mismas élites económicas que aunaron fuerzas para apoyar la candidatura de Valls están trabajando para que se produzca el acuerdo entre el partido de Colau, Barcelona en Comú (BComú) y el PSC, auspiciado por el ex primer ministro galo. "Prefieren una alcaldía en manos de izquierdas y populismos que independentista", aseguran.
El candidato socialista, Jaume Collboni, por el momento encaja bien la propuesta; de hecho es su artífice. La incógnita es qué postura adoptarán Colau y el espacio de 'los comunes' ante esta tercera vía que se abre en la Ciudad Condal. Varias voces del entorno de BComú han renegado del apoyo de Ciudadanos, por ejemplo, la concejal de Ciutat Vella en funciones, Gala Pin, ha escrito en Twitter: "No se va a pactar con Valls, estamos locos o qué?".
La animadversión que la plataforma liberal genera en el partido de Colau se traslada también a la connivencia entre ERC y JxCat a la que apela el candidato republicano Ernest Maragall. El espacio de 'los comunes' aboga, en cambio, por un tripartito, opción que choca con una de las promesas de campaña de los socialistas, quienes garantizaron evitar que un independentista fuera nombrado primer edil.
Socialistas y Comunes suman 18 regidores y necesitarían solo tres para lograr que la alcaldesa en funciones revalidara el cargo. Justamente los independientes que forman la lista de Valls: aparte de su propia regiduría, la del exalcalde de Cornellà del Llobregat, Celestino Corbacho, y la de la exdiputada de Unió, Eva Parera. Los otros tres regidores tiene carné de Ciudadanos.