El Gobierno ha tejido ya una mayoría absoluta para salvar la próxima semana ese primer examen
Vox registrará este viernes una enmienda a la totalidad al proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2021 presentado por el Gobierno de coalición de PSOE y Unidas Podemos, según ha confirmado la secretaria general de su grupo parlamentario, Macarena Olona.
Aunque se trataba de una decisión previsible, el anuncio se ha formalizado este miércoles durante la celebración de la Comisión de Interior, donde los altos cargos del Departamento dirigido por Fernando Grande-Marlaska han desgranado las cuentas de su Ministerio para el año 2021.
Olona ha denunciado la dotación que prevén las cuentas públicas para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como para los militares, y ha asegurado que esta situación "pesa mucho" en la decisión de su partido de enmendar a la totalidad del proyecto de PGE para que sea devuelto al Gobierno.
El plazo de presentación de enmiendas de totalidad acaba a las 14 horas de este viernes y su debate está previsto para la próxima semana, los días 11 y 12 de noviembre. Se trata del primer examen parlamentario del proyecto presupuestario del Gobierno de coalición, un test que no superó el Ejecutivo del PSOE a principios de 2019 cuando presentó unas cuentas pactadas con Unidas Podemos, cuya derrota provocó la disolución de las Cortes y las elecciones del 28 de abril del pasado año.
Ahora, en cambio, el Gobierno tiene ya cerca una mayoría absoluta para superar la votación. No necesita mayorías cualificadas y le basta con sumar votos suficientes para rechazar los apoyos a las enmiendas a la totalidad que se presenten, que se votan de una tacada ya que todas persiguen lo mismo: la devolución del proyecto de Presupuestos al Gobierno.
Y es que varias formaciones de la oposición han avanzado que no presentarán enmienda de totalidad y que, además, facilitarán la tramitación de las cuentas para poder negociarlas en el Congreso. Es el caso de Ciudadanos (10 diputados), el PDeCAT (cuatro diputados de los ocho de Junts), y los diputados de Partido Regionalista de Cantabria (PRC), Compromís, Teruel Existe, el BNG y Nueva Canarias, que han apostado ya por la negociación de las cuentas vía enmiendas parciales, según aseguran a Europa Press fuentes parlamentarias.
A ellos hay que sumar los votos del PNV (6), que comparte Ejecutivo con los socialistas en Euskadi y al que el Gobierno ha situado como socio de referencia en Madrid, con el que, de una u otra manera, asume que alcanzará un acuerdo.
Todos ellos, con los 155 diputados que conforman el bloque del PSOE y Unidas Podemos, formaciones que integran el Gobierno de coalición, suman ya 180 diputados, por encima de la mayoría absoluta (176), e incluso es posible que se añadan los dos diputados de Más País-Equo, coalición y socio habitual del Ejecutivo y de los que el Gobierno no espera el rechazo a tramitar los Presupuestos.
Así las cosas, el Gobierno ya no necesitaría a las formaciones independentistas de ERC, Bildu y Junts. Ni Esquerra (13 diputados) ni Bildu (5), formaciones que facilitaron la investidura de Pedro Sánchez en enero, han adelantado su voto, pero sí han mostrado su voluntad de negociar las cuentas. En todo caso, el Ejecutivo mantiene con ellos vías de diálogo en busca de su apoyo.
Además de Vox, enfrente se prevé que estarán el PP y sus socios electorales en Navarra (UPN) y Asturias (Foro), así como Coalición Canaria (CC), que ya ha avanzado que presentará la suya para tumbar las cuentas. Juntos son 144 votos, muy lejos de esa mayoría absoluta que ha ido reuniendo el Gobierno de coalición.