'Top manta': las calles españolas tienen 7.000 millones de euros en artículos falsos

Camisetas de Cristiano Ronaldo, Messi, Pogba o Griezmann a 15 euros. Perfumes que cuestan 90 euros a 12 o camisas de primeras marcas por precios irrisorios. Estas son algunas de las prendas que abarrotan las calles del centro de Madrid, Barcelona o los paseos marítimos de las principales ciudades costeras. El famoso ‘top manta’, que empezó hace más de una década con los CD’s de música, se ha transformado completamente en la última década.

La Agencia Tributaria indica que más de siete mil millones de euros están en circulación en España

Esta semana se conocía que los manteros de Barcelona creaban la marca ‘Top Manta’ para intentar vender de manera legal sus productos, debido a que todos sus artículos eran falsificados. A pesar de las buenas intenciones de los ‘manteros’, la idea sigue siendo criticada por la Asociación de Comerciantes de Barcelona. La asociación de pequeños comerciantes señalan a ‘Bolsamanía’ que “estas personas no pagan impuestos", por lo que es "ilegal". También recuerda que "aunque ya no ataquen los derechos de propiedad intelectual", su "actividad sigue estando prohibida, ya que no tienen autorización de los ayuntamientos y no pagan impuestos por estar en la calle".

INCAUTADOS 800 MILLONES DE EUROS

Esta iniciativa, a pesar del buen propósito, es sólo la punta del iceberg del complejo entramado que existe en la falsificación. La Agencia Tributaria, presentó recientemente el informe de las falsificaciones. Según este trabajo, conjunto con el Ministerio del Interior, en España se incautaron más de cuatro millones de productos, los que se traduce en un valor de mercado de 779.000.000 euros. Aunque eso sí, las cifras pueden ir a más. Mónica Dopico, Jefe de sección de delitos contra la propiedad intelectual, aclara que al ser un mercado negro “la cifra puede son muy superiores, ya que aquí solo se cuenta el material incautado. Lo que está en manos de los españoles no se puede contabilizar”, explica.

Según los datos de la Agencia Tributaria, este tipo de actividad delictiva que cada año destruye, en España más de 67.000 puestos de trabajos directos, y que supone una pérdida en ventas de más de 7.000 millones de euros.

Las joyas fueron los objetos con más valor en el mercado mantero ya que superaron los 589.055.500 euros. Al sector textil le costó 38,4 millones y 21,2 millones a marroquinería y complementos.

Andalucía fue la Comunidad Autónoma que más material se incautó y donde más intervenciones se realizaron (464). En esta región se decomisaron más de 407.500 productos. Las siguientes son la Comunidad Valenciana (208 intervenciones y 380.622 productos), Comunidad de Madrid (175 intervenciones y 367.234 falsificaciones) y Cataluña (172 intervenciones y 189.534 artículos). La razón por la que Andalucía y la Comunidad Valenciana es donde más existe este tipo de venta ilegal se debe a que es muy común que los manteros se coloquen en los paseos marítimos ya que la mercancía suele llegar en barcos.

Mónica Dopico recalca que es muy fácil detectar, para las fuerzas del orden, y para una persona de a pie este tipo de artículos. “Una persona que está comprando sobre una manta y a precios reducidos sabe que está falsificando. Nosotros (la Policía) tenemos especialistas que lo detectan con apenas unas pruebas”.

DESTRUCCIÓN DE LA MERCANCÍA

¿Y qué se hace con el material incautado? La inspectora jefe explica que es un juez el que tiene que examinar detenidamente la mercancía, una vez que la Policía ha incautado el material. A partir de los 30 días “se puede destruir”, indica. La ropa, por ejemplo, se destruye en molinos para hacer ‘papilla’ los tejidos. Otros objetos tienen que pasar por la apisonadora y los objetos químicos pasan por un proceso especial hasta ser evaporado.

De la parte de la falsificación se extrae una parte solidaria. En algunas ocasiones, la Policía intenta reciclar el material incautado. El beneficio del reciclaje se destina a la asociación de niños con enfermedades raras aunque Dolpico matiza que “es muy difícil poder destinar a buena causa las falsificaciones”.

LA RUTA DEL ‘ORO AZUL’

China es la reina de las falsificaciones. El nuevo informe elaborado por la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) indica que siete de cada diez productos provienen del gigante asiático. India, Tailandia, Turquía, Malasia, Pakistán y Vietnam son las otras potencias económicas que ‘cuelan’ las falsificaciones.

Para introducir los productos, los contrabandistas usan Hong Kong, los Emiratos Árabes Unidos y Singapur como principales centros del comercio mundial, importando cargamentos de contenedores llenos de productos falsificados que luego se envían por correo postal o servicio de mensajería. Países como Emiratos Árabes y Arabia Saudí son puntos claves para la distribución de los productos.

Según el informe, las tres cuartas partes de productos falsificados se transportan por mar y a partir de ahí el servicio de mensajería y correos son los canales preferidos para hacer llegar la mercancía.

SOSPECHOSOS HABITUALES

En cuanto al perfil de las mafias, Mónica Dopico resalta que “suelen ser viejos conocidos” y que incluso se dan situaciones de clanes familiares en el que los descendientes han cogido el ‘negocio’.

La inspectora también explica que muchas de las bandas de crimen organizado han aflorado con el ‘boom’ y la facilidad de la falsificación, e incluso algunos mafiosos se han reconvertido. “Estuvimos investigando a un clan que se dedicaba al tráfico de armas y que, tras muchas investigaciones’ se detectó una red de falsificaciones de champús.

WEBS ILEGALES MUY COMUNES

Facebook, Instagram, Twitter… es muy habitual encontrar muchas páginas webs en el que se venden camisetas de fútbol de todo el mundo o de la NBA a precios muy por debajo de su precio.

Según señala Mónica Dopico, estas páginas son “completamente ilegales porque venden contenido que atenta contra la propiedad intelectual”. “Se investigan este tipo de webs y se procede a la clausura del ‘site’ y se la pertinente multa a las personas responsables”, recalca.

En cuanto a las sanciones en las que se exponen las personas, todo depende del quién es quién. Los mafiosos cumplen condena de cárcel, pero ¿y las personas que compran? Según explica Mónica Dopico “con el código penal en la mano tendría pena de cárcel, pero no se suele sancionar así”, matiza. Según cuenta la inspectora jefe es “absurdo” porque hay que “ir a por las mafias”. Por último, señala, que lo ideal sería interponer sanciones económicas para “que las personas tomen conciencia del daño que se hace con la compra de falsificaciones”.