S&P espera que UK entre en recesión en el cuarto trimestre pero mejora el PIB de 2023
S&P Global ha revisado sus proyecciones económicas sobre Reino Unido y ha dicho que espera que la economía británica entre en recesión técnica en el cuarto trimestre de 2022.
Tal y como explica la agencia de calificación en una nota, los hogares del Reino Unido se han enfrentado a una presión cada vez más aguda sobre el poder adquisitivo debido a una inflación récord, y eso es, precisamente, lo que hará que el país entre en recesión.
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"A medida que la inflación aumente aún más durante el invierno, el gasto de los consumidores se contraerá, llevando a la economía del Reino Unido en general a una recesión técnica moderada", ha destacado el economista principal de S&P Global Ratings, Boris Glass.
Pese a todo, en la agencia han mejorado sus proyecciones de cara al año que viene. Y es que ahora los expertos de S&P esperan que el Producto Interior Bruto (PIB) de 2023 se contraiga 'solo' un 0,5%, "lo que supone una importante revisión a la baja de nuestra anterior previsión del 1%", destacan en la mencionada nota.
Creen, además, que a continuación "debería producirse un repunte", de forma que esperan un crecimiento del PIB del 1,4% y el 1,6% en 2024 y 2025, respectivamente.
"El crecimiento en estos últimos años se beneficiará, aunque de forma limitada, de las políticas fiscales a medio y largo plazo recientemente anunciadas, destinadas a impulsar el potencial de crecimiento de la economía del Reino Unido", ha remarcado también Glass.
Aunque a corto plazo, los meses de invierno presentarán desafíos. "Durante el invierno, la garantía del precio de la energía será un apoyo vital, junto con subsidios similares para las empresas", ha destacado el experto de S&P, que avisa de que "las medidas fiscales tienen un alto coste".
"Entre octubre de 2022 y marzo de 2023, la protección de los precios de la energía para los hogares y las empresas costará 60.000 millones de libras esterlinas, un 2,7% del PIB de 2019 y una magnitud similar a la del programa de permisos del Reino Unido durante la pandemia. A menos que un fuerte crecimiento a medio plazo pueda financiar por completo el gasto adicional, el endurecimiento fiscal a medio plazo parece inevitable, lo que puede pesar sobre el crecimiento futuro", ha alertado.
