Los ingresos por cotizaciones crecen un 10,2% interanual, hasta alcanzar los 89.000 millones de euros
El récord de ingresos por cotizaciones permite a la Seguridad Social registrar un superávit de 4.774 millones de euros en los siete primeros meses del año. Según los datos aportados por el Ministerio que dirige José Luis Escrivá, los ingresos por cotizaciones crecen un 10,2% interanual, hasta alcanzar los 88.999 millones de euros.
Este aumento viene impulsado por la evolución de las cotizaciones de ocupados, que experimentan un incremento interanual del 10,3%, hasta alcanzar los 83.699 millones de euros, debido al buen comportamiento del empleo en los primeros siete meses del año. Además, las cotizaciones de desempleados se cifran en 5.300 millones de euros, lo que representa un aumento del 9,3%.
De esta forma, los ingresos por cotizaciones sociales siguen marcando máximos históricos en términos absolutos y también registran el mayor incremento en los últimos 16 años en los primeros siete meses del año, destacan. Si se toman como referencia los datos de 2019, último ejercicio que no estuvo afectado por la pandemia, el incremento de las cotizaciones es del 24%.
En su conjunto, las cuentas de la Seguridad Social presentan un saldo positivo al término de julio equivalente al 0,3% del Producto Interior Bruto (PIB). Esta cifra se obtiene de la diferencia entre unos derechos reconocidos por operaciones no financieras de 123.307 millones de euros, que muestran un incremento del 13,7%, y obligaciones reconocidas de 118.533 millones, que crecen un 10,1% interanual, explica el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
En términos de caja, la recaudación líquida del sistema alcanza los 119.108 millones de euros, con un incremento del 11,1% respecto al ejercicio anterior, mientras los pagos presentan un aumento del 9,9%, hasta alcanzar los 118.264 millones de euros.
Por su parte, las transferencias recibidas por la Seguridad Social ascienden a 32.351 millones de euros, con un aumento del interanual 20%. La partida más significativa correspondiente a las transferencias recibidas del Estado y Organismos Autónomos que suma un total de 29.721 millones (un 23,4%), en particular, el incremento tiene su origen en una mayor percepción de fondos para garantizar el cumplimiento de la Recomendación Primera del Pacto de Toledo.
Por el lado del gasto, las prestaciones económicas a familias e instituciones alcanzaron 110.761 millones, un 9,3% más que en el mismo periodo de 2022. Esta cifra representa un 93,4% del gasto total realizado en el sistema de Seguridad Social. La mayor partida, 101.783 millones, corresponde a pensiones y prestaciones contributivas, con un aumento de un 9,3%.
El gasto en pensiones (incapacidad permanente, jubilación, viudedad, orfandad, en favor de familiares y complementos de pensiones contributivas para la reducción de la brecha de género) se incrementa un 10,7% hasta los 91.326 millones de euros, debido al aumento del número de pensionistas (1,1%), a la subida de la pensión media (9,6%), así como a la revalorización general del 8,5% de las pensiones contributivas en el ejercicio 2023.
Respecto a los subsidios de incapacidad temporal, el gasto total disminuye un 1,3% respecto al mismo periodo del año anterior, hasta alcanzar los 7.696 millones de euros, mientras las prestaciones por nacimiento y cuidado de menor, corresponsabilidad en el cuidado del lactante, riesgo durante el embarazo y durante la lactancia natural y cuidado de menores afectados por cáncer u otra enfermedad asciende a 2.308 millones, un 7% más.
De dicho importe, se destina a pensiones no contributivas y complementos por mínimos 5.901 millones, un 7,1% más, y a subsidios y otras prestaciones 3.077 millones, un 14,5% más, de los cuales 2.915 millones de euros corresponden a Ingreso Mínimo Vital y prestaciones familiares, un 14,7% más respecto del año anterior.