Rajoy lo fía todo a 'los cinco' del PNV para resolver el 'vía crucis' de los Presupuestos 2018

Tanto Ciudadanos como el PP han apretado las tuercas al PNV en un intento por hacerle recapacitar y que apoye los Presupuestos

Aitor Esteban, Joseba Andoni Agirretxea, Íñigo Barandiaran, Mikel Legarda e Idoia Sagastizabal. Estos son los cinco diputados que conforman el grupo parlamentario del Partido Nacionalista Vasco (PNV) en el Congreso. Desde hoy están en el punto de mira del Gobierno, ya que dada la configuración del Congreso Rajoy está obligado a buscar acuerdos para sacar adelante medidas de calado como los Presupuestos. El acuerdo con Ciudadanos, anunciado este lunes por su líder Albert Rivera, ha sido como un balón de oxígeno, pero aún así los números siguen sin salir.

El PP tiene 134 escaños en la Cámara baja, a los que con toda probabilidad sumará el apoyo de los dos parlamentarios de Unión del Pueblo Navarro (UPN) y el que tiene Foro, ya que fueron socios electorales de los 'populares' en las últimas elecciones. Con los 32 de la formación naranja las probabilidades aumentan, pero aún son votos insuficientes para aprobar los Presupuestos, incluso en segunda vuelta, cuando sólo se requiere mayoría simple (más síes que noes). Y por eso el apoyo de los peneuvistas es tan importante.

De ahí que en las últimas horas haya aumentado la presión sobre los nacionalistas vascos. Tanto Cs como el PP han apretado las tuercas al PNV en un intento por hacerle recapacitar, ya que hasta ahora se ha negado a sentarse a negociar mientras siga vigente la aplicación del artículo 155 en Cataluña. El primero en hacerlo fue Albert Rivera. El líder de la formación naranja aprovechó su intervención para anunciar el acuerdo con el Gobierno para dejar claro que, bajo su punto de vista, el acuerdo del PP con los nacionalistas vascos está hecho pese a lo que digan desde el PNV.

“A nadie se le ocurriría que Rajoy hubiera concedido el 'cuponazo' al PNV sin tener atados los presupuestos”, dijo en referencia al cupo vasco aprobado el año pasado. Es más, Rivera señaló que “sería increíble” que el Ejecutivo “hubiera concedido un privilegio de esa naturaleza y no tuviera atados los apoyos”. No obstante, el líder de Ciudadanos también señaló que “si dependemos del PNV para aprobar los Presupuestos es porque PP le ha concedido privilegios y porque el PSOE ni está ni se le espera”.

Por su parte, el PP se mostró “optimista” sobre las posibilidades que hay de aprobar los PGE con los mismos socios que apoyaron los Presupuestos de 2017 (Cs, PNV, UPN, Foro, Coalición Canaria y Nueva Canarias). Según explicó en rueda de prensa este lunes el vicesecretario de Comunicación del Partido Popular, Pablo Casado, “los antecedentes de 2017 son un buen punto de partida” y por ello confían en que no habrá problemas para que las cuentas públicas salgan adelante. A su juicio, “va a ser difícil desde la oposición justificar el rechazo”.

“Hemos repetido hasta la saciedad que, mientras esté en vigor el 155, no nos vamos a sentar con Rajoy para negociar los Presupuestos”, ha dicho el PNV

El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, también habló de los Presupuestos, y dejó claro que el Gobierno no va a “escatimar en esfuerzos para dialogar con otras fuerzas políticas”, aunque recordó que para ello es necesario que “al otro lado de la mesa haya también voluntad de llegar a acuerdos”, en lo que parecía un mensaje directamente dirigido al PNV.

Y es que los nacionalistas vascos se mantienen inamovibles. “Hemos repetido hasta la saciedad que, mientras esté en vigor el 155, el PNV no se va a sentar con Mariano Rajoy para negociar los Presupuestos Generales”, recordó miembro del partido y secretario segundo de la Mesa del Parlamento vasco, Iñigo Iturrate, en declaraciones a ETB, poco después de anunciarse el acuerdo de Ciudadanos y el Gobierno. Los nacionalistas vascos insisten en que no han dedicado ni un minuto a negociar con el Ejecutivo, y que las cosas no van a cambiar mientras siga vigente el 155.

Critican que el Gobierno haya respondido al “sentimiento de nación” que hay en Cataluña de una única forma, acudiendo a los tribunales, y señalan que “los problemas políticos se solucionan con planteamientos políticos”, y para ello “el diálogo es fundamental”. Por eso el PNV ha decidido que hasta el que el Ejecutivo de Mariano Rajoy no se replantee la situación en Cataluña ellos no van a mover un dedo para negociar los Presupuestos.

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Un planteamiento arriesgado, ya que podría provocar que los PGE no salgan adelante por falta de apoyos suficientes para hacer frente a los 'noes' del resto de partidos con representación en el Congreso, que ya han anunciado que rechazarán los Presupuestos. Además, eso podría provocar que el PNV sea señalado como el culpable de que las medidas que se han ido anunciando a bombo y platillo en los últimos días, y que beneficiarán a buena parte de la ciudadanía, no se puedan aplicar.

Por ejemplo, en materia de pensiones. Rajoy anunció que subiría las mínimas y las de viudedad siempre que se aprobasen las cuentas públicas para este año, y ayer Rivera cuantificó la subida en el 2%, como parte del acuerdo alcanzado por su formación con el Gobierno. Además, dijo que 7,2 millones de pensionistas verán sus prestaciones incrementadas “por encima del IPC”.

Aunque no sólo eso, porque en los Presupuestos también se incluirá la bajada del 21% al 10% del IVA de las entradas de cine, la equiparación salarial de todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad (Guardia Civil, Policía Nacional y Policías Autonómicas), y una ampliación de la baja por paternidad de 4 a 5 semanas. También habrá un aumento de 50 millones de euros para las becas y ayudas generales, hasta los 1.472,9 millones de euros, un 3,5% más que en 2017 y el mayor aumento desde 2014, así como ayudas para que las familias con hijos de 0 a 3 años puedan pagar la guardería.

Rebajas del IRPF, aumento de las pensiones mínimas y de viudedad, ampliación del permiso de paternidad, incremento salarial para los funcionarios... estas y otras medidas están en el aire

Las cuentas públicas incluirán también una rebaja del IRPF de unos 2.000 millones de euros, acordada con Ciudadanos, de forma que se reducirá el mínimo exento en el IRPF, que subirá de 12.000 a 14.000 euros al año para todos los contribuyentes. A esto se sumará una rebaja adicional para los jubilados que perciben entre 14.000 y 17.000 euros de ingresos anuales.

Por último, se ha acordado un incremento salarial para los empleados públicos para los tres próximos años, con una subida salarial fija del 1,75% para 2018, del 2,25% para 2019 y del 2% para 2020, a la que se sumaría otra parte variable ligada a la evolución del PIB. En total, la horquilla de alza salarial será de un mínimo del 6,9% y un máximo del 8,79% para los trabajadores públicos. Y en materia de oferta de empleo público, se eleva al 100% la tasa de reposición en sectores prioritarios y al 75% en sectores no prioritarios, a lo que se añade una bolsa adicional del 5% para los sectores que consideren necesario reforzar, con lo que se asegura creación de empleo neto. En el caso de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Policía autonómica y Policía local, la tasa de reposición sube al 115%.