Con el objetivo de cumplir con su compromiso electoral de llegar al 60% del salario medio en 2023
El PSOE y Unidas Podemos estudian "con buena predisposición" subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta los 1.000 euros mensuales para 2020, lo que supone un 11%, con el objetivo de cumplir con su compromiso electoral de llegar al 60% del salario medio en 2023.
El alza del SMI es una reivindicación histórica de Podemos una vez que en 2019 consiguieron subir el salario mínimo a 900 euros mensuales y rebajaron su propuesta inicial de 1.000 euros para aquel año. Fuentes de la negociación han confirmado a EFE que es uno de los puntos que está sobre la mesa y que "hay buena predisposición por ambas partes". Las mismas fuentes inciden en que en esta ocasión existe la misma buena sintonía que ya hubo en la negociación de presupuestos que consiguió la anterior subida, cuando el SMI se incrementó el 22,3%.
Ambos partidos contemplaban en sus programas electorales de abril y de noviembre una subida progresiva en los próximos cuatro años desde los 900 euros actuales, aunque el PSOE planteaba llegar a los 1.200 euros aproximadamente en 2023 y Podemos pedía avanzar ya hasta los 1.000 el próximo año. No obstante, fuentes del entorno negociador han afirmado que el aumento del salario mínimo podría no ser el mismo en todos los años de la legislatura y depender, por lo tanto, del entorno económico anual.
ACUERDO CON LOS AGENTES SOCIALES
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha confirmado este viernes que la intención tanto del PSOE como de Unidas Podemos es elevar el SMI al 60% del salario medio al final de la legislatura, si bien ha precisado que le gustaría que fuese fruto del diálogo social.
"Vamos a hacerlo de esa manera", ha indicado Sánchez, si bien ha matizado que el Gobierno de coalición que podría llegar a formarse entre PSOE y Unidas Podemos trataría de que el incremento fuese fruto del diálogo social con organizaciones empresariales y sindicatos y de su voluntad sobre la subida salarial.
En este sentido, ha remarcado que le gustaría que los empresarios y las organizaciones sindicales manifiesten, a través del acuerdo, cual es su voluntad de elevar el SMI para el próximo año. "Vamos a esperar a lo que nos digan los agentes sociales a este respecto", ha apostillado.
LOS SINDICATOS PIDEN SUBIR SALARIOS
UGT ha reclamado este viernes que los salarios sigan subiendo, se establezcan sueldos mínimos por convenio de 1.000 euros y se continúe mejorando el salario mínimo, todo con el objetivo de que los trabajadores ganen poder adquisitivo, se relance el consumo y se garantice un crecimiento económico sostenido ante las expectativas de ralentización.
El sindicato ha señalado que el actual escenario de baja inflación "es una consecuencia lógica de la década de crisis", donde los hogares experimentaron "fuertes pérdidas de poder adquisitivo". En este escenario de "cautela", UGT vería una buena noticia la conformación, lo antes posible, de un Gobierno estable, que pueda redirigir los Presupuesto Generales del Estado "a un camino apropiado a este contexto económico".
Por su parte, el secretario general de CC.OO., Unai Sordo, ha señalado que las empresas tienen todavía margen para subir los salarios y que los trabajadores recuperen así el poder adquisitivo perdido durante la crisis. Ha recordado que los salarios en convenio están subiendo un 2,3%, que también se están registrando incrementos en la Función Pública y que el salario mínimo SMI ha crecido un 22% y ha resaltado que, pese a esto, la inflación sigue siendo "bajísima".
Desde su punto de vista, esto ha ocurrido porque las empresas tenían "colchones" para afrontar la subida de los salarios sin subir los precios. "La política salarial todavía tiene margen", ha dejado claro. No obstante, ha dejado claro que a España "no le va mal" con este IPC, pero que es una anomalía tener la inflación tan baja, sobre todo cuando se han aplicado políticas tan expansivas y procíclicas.